Empieza la marcha contrarreloj para concluir la reconstruccón del Liceo en 1997

Las llamas que destruyeron el pasado lunes La Fenice de Venecia han alumbrado dolorosamente el recuerdo del incendio similar que hace hoy dos años arrasó el Liceo de Barcelona. Dos años, que son los mismos que faItan para que, segúm las previsiones de las administraciones, el renovado Liceo reabra sus puertas en el año en el que se comnemorará el 150º aniversario de su creación. Con los antecedentes de dos incendios en piedra propia y el recuerdo reciente del de La Fenice, la seguridad del Liceo se ha convertido en una verdadera obsesión para sus directivos

"La seguridad es uno de los temas prioritarios en el nuevo Liceo, cuyos directivos han puesto en marcha un plan director de seguridad que tiene como objetivo la coordinación de las medidas de seguridad de infraestructura, instalaciones y explotación artística del teatro", explica Joan Torres, director de seguridad del Liceo.Para Torres, la prevención de riesgos debe ser una cuestión vital en el funcionamiento de un teatro de ópera. "Es imprescindible trabajar en la prevención del riesgo y de las pérdidas, buscando un punto de equilibrio entre las exigencias de estricta seguridad, que afectan a personas, estructuras e instalaciones, y las exigencias artísticas que precisan los montajes de las grandes producciones operísticas, en las que debería estudiarse, por ejemplo, las posibilidades de ahorro energético como medida preventiva".

Comienzan las obras

La reconstrucción del coliseo barcelonés se halla en su ecuador, pero será realmente mañana cuando se iniciarán las obras con los trabajos previos a la cimentación del edificio. El director general del Liceo, Josep, Caminal, insiste una y otra vez que pese a que el nuevo Liceo ni siquiera tiene los cimientos hechos dos años después de su destrucción, el trabajo realizado hasta ahora ha sido mucho y se ha hecho rápidamente. "Es cierto que hasta ahora cuando alguien pasaba por La Rambla sólo veía en el Liceo un solar vacío, pero el proceso de expropiación de las fincas que debían derruirse para construir el nuevo escenario ha requerido un mínimo de tiempo y pese a ello hemos conseguido ir muy rápido", asegura Caminal.Mañana dos excavadoras de tecnología avanzada llamadas hidrofresas iniciarán la excavación de una zanja perimetral de 52 metros de profundidad y 1 de ancho que, llena de hormigón, aislará los cimientos del futuro teatro de las abundantes aguas subterráneas que hay en el barrio en el que se encuentra situado el Liceo. En 55 días está previsto que el muro perimetral esté finalizado y que empiecen los trabajos de vaciado de tierras.

Hoy la comisión ejecutiva del Liceo tiene previsto aprobar el proyecto ejecutivo de la caja escénica del teatro y sacar a licitación su construcción e instalación. La dirección del teatro quiere adjudicar los trabajos de realización de una de las partes más importantes del teatro el próximo mes de abril. "Veinte meses son los que aproximadamente se necesitan para construir e instalar la caja escénica; casi dos años, y ése es el tiempo que nos queda para acabar la reconstrucción del Liceo. Si no adjudicamos pronto este proyecto el teatro no estará terminado según lo previsto", dice Caminal.

La obra civil, la construcción de paredes, divisiones internas del teatro y techado del edificio, deberá empezar, para que los plazos se cumplan, el último trimestre de este año, cuando los trabajos de cimentación y construcción de la estructura no habrán finalizado todavía. El solapamiento de las diferentes fases de reconstrucción requerirá una coordinación extrema. Para ello, el Liceo ha contratado a Ernest Serra, hasta hace dos semanas director general de Transportes de la Generalitat.

Durante el próximo mes de agosto se ejecutará en el tramo de la estación de metro de Liceo el proyecto antivibratorio para eliminar del escenario del teatro los ruidos y las vibraciones que provoca el metro a su paso. La estación permanecerá cerrada, durante todo el mes de agosto para que puedan cambiarse los soportes de las vías.

El proyecto de decoración del futuro Liceo no será aprobado hasta finales del mes de diciembre. Los responsables de la reconstrucción consideran éste un proceso poco complejo pero conflictivo, ya que el aspecto de la sala del antiguo teatro era una de sus señas de identidad. "La decoración seguirá fielmente el aspecto del antiguo Liceo y dejaremos para el final el acabado de los techos. No está decidido todavía si habrá pinturas como antes o no", explica el director del teatro.

En otro orden, esta misma semana Caminal y el comité de empresa iniciarán las negociaciones para poner en práctica una reforma laboral entre los colectivos artísticos del teatro con el fin de flexibilizar sus actuales condiciones de trabajo.