La presidencia italiana de la UE resucita el proyecto Delors de grandes obras públicas
ENVIADO ESPECIAL Cuando nadie lo esperaba, saltó la liebre. Fue ayer, en el primer acto público de la presidencia italiana de la Unión Europea (UE). El presidente de la Comisión, Jacques Santer, y el primer ministro italiano, Lamberto Dini, anunciaron el propósito dé resucitar un viejo proyecto de Jacques Delors: la emisión de deuda a cargo de los Quince, con objeto de cofinanciar las redes transeuropeas de transporte, para las que falta dinero. Tras una jornada, de reuniones, ambos mandatarios se esforzaron por ahuyentar el mal augurio según el cual la crisis interna de Italia paralizará los avances en la construcción comunitaria, tras el impulso de la presidencia española.
Santer recordó cómo sendos semestres italianos protagonizaron tres ocasiones decisivas para Europa: el nacimiento del Mercado Común en 1957, el lanzamiento del Acta única en 1985 y la convocatoria en 1990 de las Confererencias que cristalizarían en el Tratado de Maastricht. Pero entre estos planteamientos defensivos ante la prensa y la reiteración de prioridades para el semestre surgió de la letra pequeña lo inesperado. Para aumentar el empleo, "estamos decididos a relanzar las grandes redes transeuropeas, y a replantear nuevamente la necesidad de la deuda Delors para financiarlas", anunció Santer. El titular de la Comisión recordó que fueron los ministros de Hacienda -en el consejo Ecofin- los que cortaron las alas a este proyecto de su predecesor, por temor a que absorbiera el ahorro interno y dificultase así la colocación de las deudas nacionales. Pero ahora, confió en los pasillos a un grupo de periodistas: "Contamos con un gran aliado, la propia presidencia.
Italia está empeñada en el programa, que incluye a uno de sus principales proyectos, el nuevo aeropuerto de Malpensa, en Milán, y el secreto de la nueva alianza es el protagonismo de Dini en el Ecofin: "Si siga siendo ministro de Hacienda no delegaré esa presidencia, sino que asistiré personalmente a las reuniones del Ecofin", advirtió el jefe de Gobierno italiano, que es también titular de esa cartera.
El programa de grandes redes incluye obras de interés especial para. España: la autopista Valladolid-Lisboa y la línea férrea de alta velocidad España-Francia (Madrid-Barcelona-Perpiñán y Madrid-Vitoria-Dax).
Los 14 proyectos prioritarios -aprobados en Corfú, en junio de 1994- se financian con préstamos del Banco Europeo de Inversiones, presupuestos de los Estados y de la UE. Pero no basta: para el periodo 1995-999 faltan 760 millones de ecus (120.000 millones de pesetas), calcula el comisario Neil Kinnock. Por eso, para completar, se vuelve a echar mano de la emisión de bonos de deuda pública. comunitaria. Santer pretende "evitar cualquier aumento presupuestario" y al poyarse en el Fondo Europeo de Inversiones.
Junto a esta resurrección, el hincapié en los programas para las pymes (pequeñas y medianas empresas) a fin de fomentar el empleo y el avance hacia la moneda única perfilan las prioridades económicas. La asignatura monetaria del semestre será la búsqueda de un acuerdo sobre las relaciones entre quienes se incorporen en la primera oleada y quienes se queden fuera, la mayoría quiere, contra el criterio de Londres, mantener un instrumento similar al del actual Sistema Monetario Europeo (SME).
"Debemos estudiarlo y no podemos avanzar conclusiones", dijo, prudente, Dini. "Pero partimos del SME, en el que estamos todos, y de su mecanismo de cambios, del que algunos [Reino Unido e Italia] estamos fuera", añadió. Parecía así desdeñar los intentos de Londres de trenzar con Roma una alianza para obstaculizar el avance en esta cuestión. Y, contra lo que había pretendido en la cumbre de Formentor, Dini dejó claro que la fecha pactada para el inicio de la tercera fase de la Unión Monetaria, el 1 de enero de 1999, es intocable.
La estrella política del semestre será la inauguración de la Conferencia Intergubernamental para la reforma de Maastricht (29 de marzo en Turín), con reuniones mensuales de trabajo de los ministros de Exteriores, y tres veces al mes de altos funcionarios. La novedad en política exterior será la nueva estrategia de relaciones UE-Asia, con una cumbre en Bangkok, también en marzo.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.