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MEJORA DE LA ECONOMÍA.

El aluvión de datos económicos conocidos ayer sirvió al Gobierno para responder al revolcón que la víspera le había dado CiU al anunciar la presentación de una enmienda a la totalidad de los Presupuestos.A finales de agosto, el IPC interanual cae hasta el 4,3%, el déficit de caja se reduce un 4,7% y el paro sitúa su tasa en el 15,08%. El Banco de España, sin embargo, mantuvo invariable el tipo de interés, dada la incertidumbre política, aunque

los mercados, que ayer reaccionaron positivamente a la coyuntura, dan por descontada una próxima rebaja. El Banco Santander anunció ayer un recorte de dos puntos -hasta el 9,50%- en sus tipos hipotecarios fijos.

Solbes insiste en que se recortará el gasto público

EL PAÍS, El ministro de Economía, Pedro Solbes, insistió ayer en que la posibilidad de que se prorroguen el año que viene los actuales Presupuestos Generales del Estado, no impedirá el ajuste que precisa la economía española. "Los presupuestos", dijo el ministro en conferencia de prensa, "marcan lo máximo que se puede gastar, pero es posible una disposición del Gobierno limitando el gasto".

Solbes manifestó así la intención del Ejecutivo de acompañar la prórroga de Presupuestos, si llega a realizarse, con un decreto ley que garantice la restricción en las cuentas del Estado. Pero, en una comparecencia destinada a dar mensajes de tranquilidad al mercado y de aviso a CiU, añadió que mediante el decreto el reparto de los sacrificios "se produce de forma distinta que a través del trámite parlamentario".

"La ausencia de Presupuestos", dijo el ministro, "genera incertidumbre, por lo que su falta no será buena. Pero mi preocupación fundamental es que va a afectar a la posibilidad de bajar los tipos de interés". "El Gobierno", continuó, "mantiene el compromiso de aplicar el déficit previsto en el Plan de Convergencia. Deseamos hacerlo con unos nuevos Presupuestos, pero si no los hay, el Presupuesto prorrogado tendría que aplicarse con criterios de reducción del déficit".

El proyecto

El problema es que el Gobierno tendrá que compaginar en ese decreto tanto la reducción del gasto público como los, compromisos adquiridos en sentido contrario. Es decir, revalorizar las pensiones y el sueldo de los funcionarios según el IPC previsto.

Hasta ahora, el escenario anunciado por el titular de Economía en la elaboración del proyecto de ley de Presupuestos para 1996 fija un, crecimiento de ingresos en torno al 7% y un aumento de gastos nominal del 3,5%, lo que supone una congelación real ya que el IPC se prevé que crezca también un 3,5%.

La reducción del gasto público que gestiona la Administración Central será de 700.000 millones de pesetas mientras ayuntamientos y comunidades autónomas deberían reducir sus gastos en otros 300.000.

Salvo los gastos comprometidos los distintos departamentos ministeriales verán disminuidas sus posibilidades, en un 7%.

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