"Temor en Ruanda a un retorno masivo de refugiados tras las expulsiones de los campos de Zaire

El Gobierno de Ruanda se dispone con temor a hacer frente a un éxodo masivo de refugiados hutus expulsados de Zaire. Los desplazados huyeron de Ruanda el año pasado como consecuencia de las matanzas étnicas que se desencadenaron durante la guerra civil. El Ejército zaireño empezó ayer las expulsiones en la región de doma y procedió a detener refugiados en el campo de Mugunga, donde se concentran unos 150.000. El pánico se extendió y, mientras unos huían, otros formaban filas voluntariamente para subir a los camiones que iban a repatriarles. Muchos se niegan a volver a sus hogares por temor a represalias, y las autoridades zaireñas se preparan a hacer frente a disturbios.El ministro de Información ruandés, Jean-Baptiste Nkuliyingoma, que se desplazó a la frontera con Zaire para recibir a los primeros repatriados, declaró ayer que las expulsiones, según advirtieron las autoridades del país vecino, pueden afectar a unos 10.000 hutus. Zaire, que no siente ninguna simpatía por el Gobierno de Ruanda, ha decidido las expulsiones tras el levantamiento por el Consejo de Seguridad de la ONU del embargo de armas a ese país, impuesto el año pasado a causa del genocidio que se estaba produciendo en Ruanda.

Las operaciones para la concentración de refugiados son realizadas por el Ejército zaireño con ayuda de camiones, autobuses y otros vehículos requisados en Goma. Según los medios de transporte empleados, se esperaba que ayer fuesen trasladados unos 2.000 refugiados a la localidad fronteriza ruandesa de Gisenyi. Unos dos millones de hutus ruandeses se encuentran refugiados en los países vecinos. Zaire acoge a un millón, y el resto está en Tanzania y Burundi.