Una muestra recoge en París las fotografías de moda de Sarah Moon
Coincidiendo con la presentación de las nuevas colecciones de moda prét-a-porter otoño-invierno 1995 en. París, el Centre National de la Photographie, situado en el Hôtel Salomon de Rothschild, ha inaugurado, hasta el 14 de mayo, la primera exposición retrospectiva sobre la obra de Sarah Moon.Moon, considerada como la mejor fotógrafa de moda, y concretamente del misterio de la mujer, inició su carrera como modelo a finales de los años cincuenta. El tormento de la pose y la necesidad de estar constantemente bella le empujó a pasar al otro lado del objetivo. Empezó fotografiando a sus compañeras de trabajo. En poco tiempo, el nuevo estilo de su trabajo, lleno de enigma y extraño movimiento, de aptitudes que mueven la imagen y que se unen por un ritmo que las sostiene, sedujo a los más grandes creadores de moda de Londres, Tokio y Nueva York. Con el apoyo de Henri Cartier-Bresson, del que ella realizó una película el año pasado que se proyecta en la exposición, París también aclamaría a esta mujer que en la actualidad frisa los 60 y cuya presencia etérea, esbelta y elegante rinde honor a su apellido, Moon (Luna), por el que muchos la creían, erróneamente, inglesa.
En los setenta se convertiría en aliada de Cacharel, cuyas últimas campañas de perfumes Annaïs, Arinaïs y Loulou le valieron el León de Oro en Cannes de 1984 a 1989. Su trabajo publicitario en las firmas de RevIon, L'Oreal, Courreges y Bally abrió nuevas puertas en el campo de la moda a la vez que preconizaba el nuevo tipo de mujer de los noventa.
Esperando al azar
Sarah Moon empezó a ser conocida en 1968, y en 1972 ya era recompensada con el Premio Dada, en sus modalidades plata y oro, a la mejor foto de moda. El día de la inauguración de la exposición, el 15 de marzo, declaró: "Desde que comencé, hace casi 30 años, hago la misma foto... Una foto de moda, un vestido, una mujer; o más bien una mujer, un vestido. Fuera, dentro, de pie, sentada, más lejos, más cerca. ¡Qué importa! Me muevo alrededor de la moda, espero el azar y busco la emoción de forma desesperada. A veces envidio a quienes saben fotografiar la vida. Yo la huyo. Parto de la nada e invento una historia. Muchas veces he dicho que nunca volvería a realizar fotografías, pero continúo, y cuando pasa algo y amo lo que veo, todo cambia de nuevo y puedo continuar sumergida en la lentitud de la jornada porque ese momento de belleza existe".
Para la exposición Vrais semblants, la primera retrospectiva de Sarah Moon, se han recopilado 150 fotografías, realizadas casi todas en Polaroid. Trazan el camino de los últimos 20 años del trabajo de Moon, en el que esencialmente fotografió el universo de la moda y sus colecciones; sin embargo, esta mujer, una empedernida viajera, no excluyó paisajes o encuentros.
Babelia
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.