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Suecia insta al renacimiento del 'bloque nórdico', ahora dentro de la Unión Europea

Xavier Vidal-Folch
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Un poco de angustia y más legitimidad

El canciller alemán dio en el clavo, al afirmar desde Bonn que el voto sueco "confirma el gran atractivo de una Europa unida frente a quienes pregonan su "cansancio". Y es que la adhesión de Suecia era la prueba de fuego de la ampliación escandinava y de la credibilidad comunitaria para las posteriores hacia el Este. Esta Europa ya ha empezado, casi sin ruido, a cambiar. Jacques Delors y Carlsson habían insistido anteanoche en que la adhesión de Suecia como líder del bloque nórdico supondrá un giro al incrementar la "dimensión social" y los esfuerzos contra el desempleo y por el medio ambiente en la UE. Ayer, el jefe de la oposición conservadora, Carl Bildt, hacía votos por "el renacimiento de la cooperación nórdica, ésta vez en el seno de la UE".Este bloque, auguraban Bildt y el catedrático de Ciencia Política de la Universidad de Estocolmo, Olof Rein, no actuará como tal en lo económico, pues los problemas son distintos (Finlandia, preocupada por su agricultura; Noruega, por la pesca y el petróleo). Pero sí apretará, sin fisuras, para ampliar la UE al Este, abrirla al Sur y profundizar la democracia en la Unión, además de empujar las políticas de empleo y medio ambiente.

Otro hecho relevante emerge del referéndum. La consagración de Carlsson como líder de los nórdicos. Y no sólo por la hegemonía de Suecia en la región sino por su victoria "muy personal" del domingo, como reconoció su rival interno del no, Sten Johansson. El líder ha sido hábil en el manejo del desacuerdo en su partido, que amenazaba con romperse como sucedió en Noruega en 1972 por la cuestión europea.

Lo tenía difícil. Primero, logró la mayoría en el congreso de junio del PSD; después apostó para que el referéndum se celebrase tras las. elecciones, confiando en su mayor capacidad de arrastre, del sí en el partido -sus electores estaban divididos, 47% por el no, 30% por el sí- desde el Gobierno que desde la oposición; finalmente hizo una campaña discreta, tolerando bien la disidencia interna, incluso de dos de sus ministras, para acelerar en los últimos días.

Reactivar el empleo

"Sí, reconozco que se ha evitado la ruptura del partido", manifestó ayer Johansson, aunque "para que eso sea definitivo deberán cumplirse las promesas de reactivar el empleo, porque de lo contrario los verdes ocuparán parte de nuestro electorado".

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"Carlsson la salido más reforzado de lo que nunca estuvo Olof Palme", concluyó Rein. Rompiendo un tabú histórico, aludió a la superior condición de "padre de la patria" del sucesor frente a la trayectoria más controvertida del mítico líder asesinado. Claro que estas ventajas se tomaban críticas -suaves- en 'boca de Bildt: "Es demasiado componedor en su partido, a diferencia de Palme", dijo. Pero la componenda ha logrado la carambola de ingresar en la UE sin desgarrar su partido.

¿Qué pasará ahora? De momento renace el optimismo económico. La Bolsa de Estocolmo registró ayer un alza del 2,8%, y el empresariado mostraba su satisfacción por un resultado que en buena parte le pertenece. El viernes, la ratificación parlamentaria finlandesa, para la que los recalcitrantes abandonarán su filibusterismo. El día 28, el referéndum noruego: Los suecos "son nuestros principales vecinos y socios comerciales y lo que han decidido es importante para nuestros empleos", empezó a capitalizar la primera ministra, Gro Harlem Brudtland. Y luego, el 1 de diciembre, la reforma constitucional sueca (artículo 10.5) para posibilitar la "transferencia de soberanía" a Bruselas y el 14 de diciembre, la ratificación parlamentaria, que será plácida.

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