Los 'híper' recaudaron 85 millones de media, cuando hay sanciones de hasta 100 millones

Los consumidores madrileños aprovecharon el día festivo de ayer para acudir con normalidad a los siete hipermercados que abrieron en la ciudad, todos propiedad de las principales multinacionales del sector. Muchos usuarios desconocían la prohibición de la Comunidad de Madrid sobre esta apertura. La afluencia de visitantes fue considerada como la habitual para un viernes -ahora, el segundo día de la semana en ventas- por los responsables de estas superficies. Los inspectores regionales levantaron acta de la infracción, que podría ser multada hasta con 100 millones.

Los inspectores de Consumo de la Comunidad levantaron acta de la infracción de estos hipermercados, que, catalogada como muy grave, puede supo ner multas que oscilen desde los 2,5 millones de pesetas hasta los 100 millones, según se estipula en la Ley de Horarios Comerciales. El presidente de la patronal de las grandes superficies comerciales (ANGED), José Serrano, evaluó en 600 millones (unos 85 por centro, de media) las ventas que estos híper pudieron recaudar ayer, pero no precisó los beneficios.Los centros que vulneraron las órdenes de la Comunidad contra la apertura de los comercios fueron los tres híper de Alcampo (Moratalaz, Vallecas y La Vaguada), los dos de Pryca (Hortaleza y Villaverde), el Continente de Aluche -todos ellos de cadenas francesas- y el Jumbo de la calle de Pío XII, de capital portugués. También atendieron a sus clientes supermercados más. pequeños de la cadena Expreso o Udaco, según ANGED.

Almacenes como El Corte Inglés o Galerías Preciados y supermercados como Hipercor o Alfaro cumplieron lo marcado por el Gobierno regional.

El presidente de ANGED adelantó que esta patronal recurrirá las posibles sanciones. Por el contrario, el vicepresidente de la Confederación General de las Pequeñas y Medianas Empresas (Copyme), Salvador Bellido, anunció que presentará el lunes denuncia contra las empresas que no hayan acatado el cierre marcado por la ley y dirigió su mirada a las cadenas de capital francés y a las librerías Crisol.

Jesús Navarro, el gerente del Alcampo de La Vaguada, etiquetó la jornada como tranquila: "Los consumidores han venido como cualquier viernes". Este hipermercado, por el circularon ayer unas 40.000 personas, realizó alrededor de 16.000 operaciones.

Aluvión de clientes

Justo Sánchez Fernández, vecino del barrio del Pilar, regresó ayer a Madrid tras mes y medio de vacaciones y acudió a este AIcampo a repostar provisiones: "No conocía la polémica, pero si la Comunidad no autoriza la apertura este hipermercado debía de haber cerrado también". En La Vaguada sólo abrió alguna cafetería.

En Jumbo, a media mañana las cajas rebosaban de clientes. El director del centro, Ignacio Romeo, acudió al trabajo preocupado por la posible intervención ante las puertas de piquetes de pequeños comerciantes. No ocurrió nada. Romeo calcula que unas 20.000 personas pasaron ayer por Jumbo y efectuaron unas 10.000 operaciones. Romeo comprobó que muchos usuarios acudían despistados y desinformados: "Unos 200 nos han pedido que hagamos algo, pero nosotros qué podemos hacer". Para justificar la apertura añadió: "La orden de cierre ha sido muy precipitada y casi inmediatamente después de las vacaciones, y nosotros ya no teníamos capacidad de reacción".

Con su carrito repleto y ante la puerta de Jumbo, Elisa Lengomín demostró conocer la polémica y se mostró comprensiva con los inconvenientes del cierre en días festivos: "He escuchado en la radio, que abrían y he venido. Si hoy no llega a estar abierto hubiera comprado otro día o, como hago los domingos, me paró en un híper de Pelayos de la Presa."

El director del Pryca de Hortaleza, Sebastián Casado, ratificó también la normalidad de la jornada, en la que, según sus cálculos, registraron 8.000 operaciones y pasaron unas 20.000 personas por este híper.

Los híper abrirán mañana de nuevo. No lo volverán a hacer en festivo hasta el primer y segundo domingo de octubre.