El inventario del desconocido patrimonio de la Iglesia se prolongará otros diez años

El inventarlo general de bienes muebles del patrimonio no estará listo en junio de 1995, según establece la Ley, del Patrimonio Histórico Español de 1985. Centrado en los objetos pertenecientes a la Iglesia, se han realizado hasta esta semana un total de 110.000 fichas, en un trabajo de los últimos seis años, tras un periodo de desencuentros entre instituciones y administraciones. El Ministerio de Cultura estudia ampliar en ocho o diez años el tiempo necesario para completar unas 400.000 fichas sobre un patrimonio desconocido y oculto. La Iglesia católica tiene el 65%-70% de todo el patrimonio.

El conflicto entre historia y devoción en Pastrana (Guadalajara) y la caída desde 40 metros de la estatua de san Lorenzo en la catedral de Burgos son las últimas anotaciones en el registro del patrimonio histórico español, definido como "el principal testigo de la contribución histórica de los españoles a la civilización universal y de su capacidad creativa contemporánea" (preámbulo de a Ley de Patrimonio Histórico, de 25 de junio de 1985).En esta misma ley figuran como patrimonio los inmuebles y objetos muebles de interés artístico, histórico, palentológico, arqueológico, etnográfico. científico o técnico, así como el patrimonio documental y bibliográfico, los yacimientos y zonas arqueológicas, los sitios naturales, jardines y parques. El legislador no, tiene en cuenta el concepto cambiante de patrimonio, que hoy incluiría la arqueología industrial.

Una tarea específica que incluye la ley es la realización en 10 años del inventario general de bienes muebles, un objetivo que surge a principios de siglo con la misma creación de la Dirección General de Bellas Artes y que por parte de la Iglesia católica también se contempla en el derecho canónico. La Iglesia católica es propietaria de cerca del 70% de todo el patrimonio, en donde figuran 82 catedrales y 300 monasterios.

En los últimos seis años, el inventario se ha centrado en los bienes muebles de la Iglesia católica, por ser el más amplio y desconocido. El Estado de las autonomías y la sentencia del Tribunal Constitucional de 1991 sobre los procedimientos administrati7 vos para la declaración del bien de interés cultural (BIC) y su inclusión o exclusión del inventario general, se unieron a otras dificultades técnicas y económicas, como el modelo de ficha homologada (descripción del objeto, historia, situación y fotografía) y la aportación de Cultura (5.500 pesetas por ficha).

Todo en fichas

Para el estudio de las obras de arte se han formado comisiones en cada autonomía con representantes del Gobierno autonómico y la Iglesia. En esta semana, el número de fichas realizadas era de 110. 000, con copias distribuidas al Ministerio de Cultura, la administración autonómica, la diócesis y la parroquia que tiene la pieza. De estas propuestas de declaración hay 16.538 ya declarados e incoados y 1.924 considerados bic, como el retrato de don Félix de Azahora y Pereda, de Goya (Aragón), y el San Juan de Dios transportando a un enfermo, de Murillo (Andalucía). Castilla y León, Andalucía y Galicia aportan el mayor número de fichas, y la autonomía más retrasada es, el País Vasco, que empezó este inventario en 1991, mientras Navarra lo tiene, prácticamente terminado. El Ministerio de Cultura estudia la forma legal de ampliar el plazo de 10 años, que termina en junio de 1995, según la Ley del Patrimonio, con otros 8 ó 10 años para la realización del inventario, según confirmó José Guirao, director general de Bellas Artes del Ministerio de Cultura, desde sus vacaciones en un pueblo de Almería. En la última reunión, en junio, del Consejo del Patrimonio, con representación de Cultura y automomías, se calculó que el inventario incluiría 400.000 bienes, aunque otras fuentes de la Administración central lo sitúan en un millón de fichas.

"Hay un marco jurídico vivo de diálogo y colaboración entre el Estado y la Iglesia", declara Ángel Sancho, director del Secretariado Nacional del Patrimonio Cultural de la Iglesia, que califica de "balance positivo" los acuerdos establecidos entre los Gobiernos autónomos y los obispos. "Sociológicamente, la Iglesia somos todos, ya que el .95,5% estamos bautizados", señala, y añade que el patrimonio de 2.000 años "de signo sacro" es también patrimonio nacional y de la humanidad.

Este patrimonio eclesiástico se distribuye en 66 diócesis, con unos mil edificios casa una, según datos de Ángel Sancho, quien recuerda que la Iglesia invierte entre 15.000 y 20.000 millones en su patrimonio, procedentes en su mayoría de los fieles, cifra que ha sorprendido a José Guirao. Ángel Sancho pone el ejemplo de su reciente visita a Capillas (Palencia), en donde se ha derrumbado una parte. del crucero, y que, con 180 habitantes, se han reunido en una colecta ocho millones de pesetas.

Tiempo de catedrales

Una "verdadera actitud de colaboración" es el objetivo más inmediato, según Ángel Sancho, tras la desaparición de las épocas negras de expolio del patrimonio. "Hoy no hay robos de obras notables, como ocurría en los años setenta y ochenta; hoy no se enajena ni un pluniero". El testimonio de la venta tipo tímpano de iglesia romana de Santa Cruz de Mena (Burgos), vendido en 1977 por 73.000 pesetas, figura en el estudio Lo que se llevaron de esta tierra, de Gonzalo Santonja, que acaba de publicar en libro el diario El Norte de Castilla.

La colaboración se va a concretar este, otoño con un acuerdo entre Cultura y la Conferencia Episcopal, cuyo borrador está en estudio, y en el que se van a incluir el inventario de los bienes, el plan de catedrales y, como novedad, el compromiso de los recursos económicos. Sobre las catedrales se concretarán el plan director y el consejo de fábrica para un seguimiento de las actuaciones.

Las catedrales también se han descubierto con el proyecto de Las edades del hombre, con cuatro exposiciones desde 1987 de objetos artísticos de las 11 diócesis de Castilla y León, que han registrado tres millones y medio de visitantes." Más de mil piezas han sido documentadas y restauradas en su mayoría, en una labor de investigación, y búsqueda, como señala el subcomisario Marciano Sánchez.

Estas muestras han ocupado los talleres del Instituto de Conservación y Restauración de Bienes Culturales, de Cultura. Su anterior director, Dionisio Hernández Gil, uno de los arquitectos que preparan el plan director de la catedral de Burgos, considera el camino de los convenios entre instituciones como el más eficaz para salvar el patrimonio.