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EN EL CORAZÓN DEL HORROR

Más rápidas, más eficaces

Las ONG han tomado la delantera a los Gobiernos para paliar las catástrofes humanitarias

La tragedia de Ruanda ha puesto nuevamente de relieve la importante labor que desempeñan las organizaciones no gubernamentales ONG), capaces de filtrarse y de llegar con mucha más rapidez que los Gobiernos a los más diversos puntos del planeta. Cada día son más los ciudadanos que confían sus donaciones privadas a. estas organizaciones, mientras los Gobiernos se han visto obligados a cambiar la actitud casi beligerante que mantuvieron con ellas en la década pasada por la de cooperación. En un mundo donde los Estados están condenados a. perder poder, las ONG aparecen como las nuevas colonizadoras, trasmisoras del desarrollo de los países más avanzados y portadoras de una diplomacia menos agresiva que les permite poner en contacto la cultura de la riqueza y la opulencia con la de la pobreza y la miseria.Las ONG están convencidas de que son "más rápidas y más. eficaces" que los Gobiernos, y no dudan en argumentarlo. "Los Gobiernos esperan a que se dé una situación totalmente catastrófica para actuar. Entonces se tropiezan con múltiples dificultades que nosotros resolvemos mucho más fácilmente porque ya llevamos mucho tiempo trabajando en silencio en esos países", afirma Enrique Albizu, presidente de Medicus Mundi-España.

Esta ONG, establecida en España en 1963, tiene en la actualidad 75 españoles desplazados al Tercer Mundo -dos de ellos en Ruanda- en diversos proyectos de desarrollo a medio y largo plazo. Organismo consultor de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Medicus Mundi llevaba ya varios años trabajando en Ruanda cuando estalló la actual crisis. Hospitales, centros de salud y centros de acogida para huérfanos del sida formaban parte de los 12 proyectos que esta ONG desarrollaba en ese país y que en la actualidad funcionan con el personal nativo que tenían a medio formar.

Ignacio Carreras, subdirector de Intermón, fundada en España en 1956, considera que "es tan importante o más" acudir en situaciones de emergencia como crear las condiciones necesarias para que el país pueda desarrollarse. Por ello, esta ONG se dedica principalmente a proyectos a medio y largo plazo de desarrollo rural y de generación de ingresos tanto a nivel rural como urbano. Con un presupuesto para 1994 de 2.450 millones de pesetas -el 60% procedente de sus 80.000 socios y de donaciones únicas y el 40% restante de la Unión Europea, del Gobierno español y de las administraciones regionales-, Intermón dedica gran parte de su esfuerzo a la capacitación y educación de los nativos.

La dimensión de la catástrofe de Ruanda ha obligado a esta ONG a dejar para una segunda fase los proyectos de desarrollo que realizaba en ese país y dedicarse desde hace dos meses a repartir alimentos, ropa y agua en el campamento de Benako (Tanzania), donde se han refugiado 300.000 ruandeses, al igual que en los campamentos de Zaire, donde trabaja en asociación con Vetermon. Carreras asegura que ya han enviado 20 millones de pesetas para comprar 350 toneladas de alimentos en Zaire. "Nosotros preferimos comprar en el país en el que están los refugiados por que así se beneficia también la población local".

La captación de recursos de las ONG varía considerablemente. Algunas, como Médicos del Mundo, obtienen casi el 90% de sus recursos de la Unión Europea el Gobierno y las Admininistraciones locales a las que les presentan sus proyectos y éstas, si lo estiman oportuno, los financian. A veces, incluso, son llamadas para realizar un proyecto determinado. Otras, como el Centro de Estudio y Solidaridad con América Latina (Cesal) obtienen la mitad de sus fondos por donaciones y cuotas de socios y la otra mitad por financiación pública. En otras como Intermón, el porcentaje de recursos propios -donaciones y socios- llega al 60%, pero esto no es lo común. Las ONG tienen cada vez más financiación gubernamental porque cada día que pasa las Administraciones las necesitan más. Si en gran medida es positivo, también está contribuyendo a que algunas ONG crezcan de forma desmesurada y comiencen a burocratizarse como si fuesen ministerios, perdiendo eficacia.

La Agencia Española de Cooperación Internacional (AECI) del Ministerio de Exteriores español ha sido la primera en recurrir a las ONG para hacer frente a la castástrofe de Ruanda. Ayer se reunió con los dirigentes de 13 de ellas y con la coordinadora de las ONG para el desarrollo, para estudiar cual es la mejor forma de emplear los 1.000 millones de pesetas que el Gobierno español ha destinado a la ayuda a Ruanda.

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"Queremos que sean las ONG las que distribuyan sobre el terreno la ayuda española", afirmó Javier Casas, director del Gabinete Técnico de la AECI. En su opinión, el mayor problema con que se enfrentan estas operaciones es lograr "que la ayuda llegue a donde debe llegar".

Aunque la AECI envía un funcionario a la zona que se encargará de coordinar la ayuda, Casas está convencido de que el personal de las ONG es el que verdaderamente puede evaluar las necesidades. En este sentido, ayer se acordó que la AECI destine gran parte del dinero gubernamental a enviar un avión cada 10 días aproximadamente en el que se transportaría la ayuda recogida por las ONG y al personal que éstas requiriesen anoche salió el primer avión y hay otro Hércules con 15 toneladas de ayuda preparado

Para el vicepresidente de Médicos del Mundo, Camilo Tomé, "ésta es la primera vez que el Gobierno, español pone a disposición de las ONG todos. los medios necesarios para que se pueda realizar una misión humanitaria, lo que significa un importante avance para una cooperación más estrecha". "España", añade, "no tiene mucha experiencia en este tipo de acciones y el paso ahora dado puede tener una gran importancia logística en el futuro".

Médicos del Mundo llegó a España en 1990, pero es independiente de la cabeza francesa. Esta ONG se dedica tanto al trabajo con marginados en el interior de España como a proyectos en el Tercer Mundo. En la actualidad tiene unos 50 voluntarios trabando en España y otros 50 en frica, América Latina, Bosnia y Albania.

Cáritas, con delegaciones en -141 países, es una de las ONG con más experiencia y de las más críticas con la actuación de Naciones Unidas en el Tercer Mundo. "El problema de la ONU es que se moviliza muy rápidamente cuando hay intereses económicos estratégicos y no lo hace con tanta celeridad cuando se trata de salvar vidas humanas, como es el caso de Ruanda", declara su secretario general, Palo Martín Calderón. Cáritas ha enviado ya a 12 cooperantes españoles a Ruanda y hoy salen otros 14. "Algunos son misioneros que vienen a nosotros como voluntarios y que si los seleccionamos -tienen el enorme valor de conocer las lenguas locales y el país- tenemos que obtener el permiso de sus congregaciones, ya que mientras- trabajan para Cáritas dependen únicamente de Cáritas", dice Martín.

Recogida de fondos

A pesar de que Cáritas Española dedica cuatro quintas partes de su labor a trabajar en el interior. del España -con marginados, gitanos, inmigrantes, drogadictos, enfermos de sida, transeúntes sin casa y otros colectivos ya ha recogido en su campaña para Ruanda 175 millones dé pesetas.

Médicos Sin Fronteras, creada en Francia en 197 1, ha tenido una fuerte expansión en Europa, donde tiene sedes en otros cinco países, incluida España, adonde llegó en 1986. En la actualidad 130 cooperantes españoles realizan un total de 25 proyectos en 14 países de África, América Latina y Georgia. Esta ONG se mueve con una rapidez extrema en las situaciones más atroces. Cuando la guerra civil estalló en Ruanda con toda su virulencia, ocho cooperantes españoles se trasladaron al campamento tanzano de Beriako. En los últimos días, otros dos logistas y una enfermera se han desplazado a Gikongoro y Bukabu, localidades cercanas a la frontera común ruando-zaireña, en la que se agolpan 1.200.000 refugiados.

Esta organización dedica el 11% de su presupuesto a los gastos de infraestructura, entre los que se encuentran las gratificaciones que sus médicos cobran mensualmente, que oscilan entre las 80.000 y las 120.000 pesetas.

Cruz Roja Española también ha desarrollado una campana para ayudar a Ruanda que consiste básicamente en la captación de fondos y donaciones que son enviadas a Ginebra, desde donde se coordina, a través del Movimiento Internacional de la Cruz Roja, toda la ayuda para situaciones de emergencia. El MICR atiende a dos millones de ruandeses y distribuye diariamente comida para 900.000 personas.

Miles de voluntarios españoles

Miles de españoles colapsan con sus llamadas las centralitas de las organizaciones no gubernamentales (ONG) para ofrecerse corno'. voluntarios en Ruanda. "No damos abasto para atenderlos. La respuesta a la petición de ayuda ha sido brutal" señala Virginia de la Guardia, portavoz de Médicos Sin Fronteras.Las vacaciones veraniegas son uno de los factores que ha movido a mucha gente a decidirse por hacer durante ese corto período una labor humanitaria. La mayoría son jóvenes, muchos ni siquiera hablan idiomas ni tienen especiales conocimientos del Tercer Mundo. Les mueve simplemente la voluntad de ser útiles. Sin embargo, comenta Enrique Albizu, presidente de Medicus Mundi, "precisamente en situaciones de emergencia es cuando se necesita a la gente más especializada". "No podemos" añade, "permitirnos el lujo de enviar a una persona que en lugar de servir de ayuda nos cause problemas".

Las ONG han comenzado un riguroso proceso de selección de voluntarios. Debido a la situación de Ruanda todas están interesadas especialmente en personal sanitario. Cada una pone énfasis en un determinado aspecto de las personas que enviarían a ese país africano, aunque en general insisten en la conveniencia de que hablen al menos un idioma extranjero y tengan experiencia profesional.

Pablo Martín, secretario general de Cáritas, señala que debido al "fuerte impacto que causa en una persona el encontrarse con la muerte a bocajarro" prefieren que quienes vayan a Ruanda no sean demasiado jóvenes. Cáritas tiene además la enorme ventaja de poder elegir entre los múltiples misioneros que trabajaron en ese país y que conocen las lenguas locales, muchos de los cuales se han presentado voluntarios.

Tanto Médicos Sin Fronteras como Médicos del Mundo creen que una prestación de un mes es muy corta y prefieren períodos de tres meses. Intermón, sin embargo, envía a sus cooperantes por períodos más cortos y con el principal propósito de que formen a los nativos. Todas huyen de los "turistas por el Tercer Mundo" cuyo objetivo es "conocer países exóticos".

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