Bruselas defiende los derechos de autor con un impuesto a las cintas vírgenes

La Comisión Europea propondrá a los ministros de Economía y Finanzas de la Unión Europea la creación de un nuevo impuesto que gravará la venta de cintas vírgenes y de aparatos reproductores de audio y de vídeo. El impuesto oscilará entre las 24 pesetas de una cinta de audio de una hora y las 1.600 pesetas de un aparato de reproducción de vídeo. La recaudación se destinará a pagar los derechos de autor. Esta fórmula servirá para compensar a los autores por la piratería existente en la reproducción de obras musicales y cinematográficas.La propuesta, elaborada por la Dirección General 15 de la Comisión Europea responsable de los temas de mercado interior, será presentada en septiembre al Ecofin, y es consecuencia de casi dos años de discusiones debido a la disparidad de legislaciones sobre derechos de autor en el conjunto de la Unión.

La propuesta que estará sobre la mesa del Ecofin grava con 0, 15 ecus (24 pesetas) cada hora de las cintas de audio; 2 ecus (320 pesetas) cada aparato de grabación de audio; 0,25 ecus (40 pesetas) cada hora de cinta de grabación de vídeo; y 10 ecus (1.600 pesetas), cada aparato grabador de vídeo. Estas serían las tasas que marcarían el mínimo, sin perjuicio de que cada Estado decida aplicar tarifas superiores.

Esta iniciativa pretende unificar la defensa de los derechos de autor en la UE en un sector en el que se hace imposible la lucha contra el fraude por las copias ilegales que eluden el pago de los derechos de autor.

La normativa de la Comisión propone que las tasas sean abonadas por los mayoristas e¡ por los importadores, para ser posteriormente distribuida entre los autores, los productores y los artistas independientes a través de las sociedades de gestión colectiva, de forma que cada uno de estos estamentos reciba al menos un 20% de la recaudación de esta nueva tasa. Las emisoras de radio estarán excluidas del cobro de esta tasa, salvo si actúan como productores.