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Historia, desnudos y vísceras conviven en la Primavera Fotográfica

Un pequeño cartel presenta una mujer desnuda, al estilo de las Venus clásicas, con una careta de león y una leyenda con esta pregunta: "¿Tienen que estar desnudas las mujeres para entrar en el Metropolitan Museum?". A pocos metros, la fotografía coloreada de una maja cuyo único atuendo es una larga mantilla que la cubre parcialmente. La primera pieza es obra de las Guerrilla Giris y puede verse en la exposición Dominio público; la segunda la realizó entre los años veinte y treinta Josep Massana. Las dos exposiciones conviven estos días en el Centro de Arte Santa Mónica, de Barcelona, dentro de la séptima edición de la Primavera Fotográfica. Imágenes históricas y documentales comparten espacio en esta ocasión con desnudos y vísceras.

De hecho, la Primavera Fotográfica, que dirige David Balcells, no tiene límites temporales o temáticos definidos, pero oficialmente la mayoría de las 57 exposiciones se concentran entre el 25 de abril y el 31 de mayo, y los temas se agrupan en cuatro apartados: patrimonio, mecenazgo, gastronomía y creación compartida. Este certamen bienal, organizado por la Generalitat. de Cataluña con la colaboración de Kodak, reúne las actividades impulsadas por múltiples entidades públicas y privadas y tiene como objetivo difundir la fotografía desde una perspectiva amplia.Pese a esta indefinición, algunas exposiciones funcionan como banderas de los distintos apartados. Es el caso, por ejemplo, de Dominio público, abierta hasta el 15 de junio, una exposición enmarcada en el tema de creación compartida, que recoge el trabajo de grupos de activistas anglosajones que utilizan la fotografía para sus reivindicaciones políticas o sociales. Entre los grupos representados más conocidos figuran los neoyorquinos Group Material, Guerrilla Girls y Grand Fury.

El apartado de patrimonio y homenajes tiene dos exposiciones emblema, la dedicada a Josep Massana, que se inauguró el lunes y estará abierta hasta el 30 de junio, y la. de Robert Mapplethorpe, que puede visitarse hasta el 19 de junio en la Fundación Miró. La antológica de Josep Massana (Granollers 1892-Barcelona 1979) simboliza el interés de los organizadores por la conservación del patrimonio.

Conservación

Muchas colecciones históricas han desaparecido o están en peligro de hacerlo, y la Generalitat se propone realizar una estudio que catalogue todos los archivos y asegure su futura protección. En el caso de la colección Massana, la familia conservó muchos positivos, pero la mayoría de los negativos se han perdido. La exposición recoge una selección de las fotografías de este autor, que -además de ser un boyante exhibidor cinernatográfico- destacó en las fotografía publicitaria, en la que introdujo técnicas vanguardistas. También son remarcables sus obras más personales desnudos y composiciones simbólicas-, en las que se dejó influir por la pintura y el cine de la época.Effluvia, exposición de la británica Helen Chadwick, representa el apartado, más reducido, dedicado a la gastronomía. Chadwick, cuya exposición se inaugura hoy y permanecerá hasta el 12 de mayo en la Sala Catalunya de la Fundación La Caixa, utiliza elementos orgánicos en sus composiciones. Sus fotografías parten de elementos tan poco ortodoxos como el chocolate, las flores, cerebros de animales, carne, vísceras o gusanos. Una parte de la exposición, Piss flower, se ha realizado a partir del surco que se produce al orinar en la nieve. Chadwick realiza un contramolde del surco dejado y realiza esculturas en bronce de formas caprichosas.

El último apartado, encargo y mecenazgo, es el más numeroso. Una de las exposiciones emblemáticas es Barcelona a vuelo de artista, ya inaugurada en el Centro de Cultura Contemporánea de Barcelona (CCCB), donde permanecerá abierta hasta el 30 de junio.

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