El candidato de Kohl a la presidencia de Alemania renuncia y propone una fórmula de consenso

El polémico candidato del canciller Helmut Kohl para la presidencia federal, Steffen Heitmann ha renunciado a sus aspiraciones para dejar paso a un candidato de consenso. Heitmann, a cuya candidatura se oponía mcluso un elevado número de miembros de su partido, la Unión Cristiana Democrática (CDU), anunció por sorpresa su decisión en Dresde, donde ejerce sus funciones de ministro de Justicia de Sajonia, mientras el Parlamento federal debatía los presupuestos de 1994. Polémicas declaraciones sobre las mujeres, los emigrantes o la construcción europea han obligado a Heitmann a retirarse.

La renuncia había sido comunicada al canciller Kohl por el propio Heitmann en una conversación telefónica en la noche del miércoles, pero el anuncio oficial cayó en Bonn como una bomba y motivó la suspensión del pleno del Bundestag para que los partidos de la coalición de Gobierno pudieran estudiar la situación.En su comunicado de renuncia, Steffen Heitmann asegura que quiere "dejar el camino libre para un candidato de consenso originario del Este de Alemania". Propone que todos los partidos renuncien a los que ya han nombrado y apoyen al socialdemócrata Richard Schröder, profesor de Teología de la Universidad Humboldt de Berlín y pastor evangélico, que permanece apartado de la vida política desde que fracasara en su intento de ocupar la presidencia del SPD en 1990. Su cargo político más reciente fue la presidencia del grupo parlamentario del SPD en el último Parlamento de la desaparecida República Democrática Alemana, donde recibió numerosas críticas por su estrecha colaboración con el Gobierno de la CDU.

La candidatura de Heitmann había sido objeto de críticas desde todos los sectores de la sociedad alemana desde que se diera a conocer el pasado 9 de septiembre. El día 16 del mismo mes, cuatro días después de que el Congreso de la CDU le prestase su respaldo, Heitmann cuestionaba en unas declaraciones a EL PAÍS el Tratado de Maastricht que su mentor, Helmut Kohl, había defendido con tanto ahínco.

Posteriormente, cada pronunciamiento del aspirante a presidente fue analizado con lupa. De nuevo volvieron a llover las críticas cuando manifestó que el puesto de la mujer alemana estaba en la cocina, o que había llegado el momento de correr una cortina sobre el pasado nazi Tampoco fueron ajenos a la polémica sus pronunciamientos sobre el "excesivo número de extranjeros en Alemania", que fueron contestados por sus propios compañeros de partido cristianodemócratas.

El canciller Kohl, que había apostado muy fuerte por la candidatura a presidente del ministro de Justicia de Sajonia, ha aceptado su renuncia "con gran respeto", según una nota de la Cancillería Federal. Kohl, que lamenta la decisión de Heitmann le agradece, sin embargo, "haberse prestado para servir al país en una fase tan difícil". La nota va más allá de las razones aducidas por Heitmann en su renuncia y se refiere a las críticas recibidas por el candidato, asegurando que la campaña contra él "es vergonzosa para todos los que participaron en ella".

Similares declaraciones formales de comprensión han sido efectuadas por los socios de la CDU en la coalición de Gobierno, el Partido Social Cristiano Bávaro (CSU) y el Partido Liberal (FDP). Pero entre las tres partes siguen sin cicatrizar las heridas abiertas por la nominación unilateral de Heitmann por parte de la CDU.

Resistencia liberal

El FDP no ha renunciado de momento a su candidata, Hildegard Hamm-Brücher, y sólo estaría dispuesto a retirarla para negociar un candidato de "consenso amplio" si los socialdemócratas del SPD hicieran lo propio con su aspirante, el ministro presidente de Renania del Norte-Westfalia, Johannes Rau. Pero el SPD se mantiene en su respaldo a Rau, que fue ratificado por unanimidad en el congreso del partido celebrado hace una semana en Wiesbaden.

Los socialdemócratas, que sin apoyo de miembros de los partidos hoy en el Gobierno no podrían imponer a su candidato a la Asamblea Federal que se celebrará la primavera próxima, han sido los más críticos con el abandono de Heitmann.

La retirada del candidato de Kohl es "una derrota para el propio canciller", según el secretario de organización del SPD, Günter Verheugen, "ya que documenta su pérdida de poder y contacto con la realidad".

En los primeros contactos para buscar un candidato alternativo, el canciller Helmut Kohl ha insistido en que el próximo presidente alemán debe ser un ciudadano de los llamados Nuevos Estados (eufemismo que significa la ex Alemania del Este).