VW estudia financiar la reconversión de Zona Franca

El Gobierno ha planteado a Volkswagen la participación alemana en el parque industrial que se proyecta como alternativa para evitar la total desaparición de la factoría de Seat en Zona Franca. La oferta fue planteda en el encuentro del presidente del consorcio, Ferdinand Piéch, con el vicepresidente del Gobierno, Narcís Serra, el miércoles pasado. Piéch comunicó entonces a Serra -y horas después al presidente de la Generalitat, Jordi Pujol- su decisión firme de no producir más coches en Zona Franca (ver EL PAíS de ayer). Se trata ahora de negociar un calendario para optar por una retirada rápida o esperar a la muerte comercial del Seat Toledo, en cuatro o cinco años.Estas infórmaciones -confirmadas de forma confidencial por fuentes de Volkswagen y del sector público- fueron ayer negadas por el ministro de la Presidencia, Alfredo Pérez Rubalcaba: "Por la información que tiene el Gobierno, los responsables de Volskwagen aún no han tomado una decisión definitiva sobre la fábrica que Seat tiene en la Zona Franca de Barcelona", declaró. Rubalcaba añadió que en las próximas semanas se mantendrán reuniones con los directivos de la multinacional para "la búsqueda de la mejor so lución para mantener la mayor ac: tividad y el mayor número de puestos de trabajo posibles".

Al ser preguntado sobre si el Gobierno apoyaría un parque industrial en Zona Franca como sustitutivo de la producción de coches, contestó: "El Gobierno no tiene interés en participar en el capital de Seat pero sí en colaborar con sus actuales dueños en la búsqueda de la solución que más actividad y puestos de trabajo mantuviera en Seat dentro de los escenanos de ajuste".

Contactos prometedores

El consorcio Volkswagen, por su parte, aseguró ayer en una nota que las conversaciones sobre la crisis de Seat "están transcurriendo de manera prometedora", al tiempo que indica que el futuro de la factoría de Zona Franca aún no está decidido, informa J. M. Martí Font. Según la nota hecha pública en Wolfsburg, "todos los implicados han decidido seguir con las conversaciones". La nota de Volkswagen, sin embargo, en ningún momento señala que vaya a seguir fabricando coches en Zona Franca. Ferdinand Piéch, eso sí, la voluntad de Volkswagen de mantener la independencia de Seat, en referencia a las informaciones publicadas por este diario el día 3.

Según el portavoz de Volkswagen, Otto Ferdinad Wachs, que se encuentra con Piéch en España, les mucho más importante convertir Seat en una empresa competitiva que discutir sobre el propietario de las instalaciones", según informaciones de la prensa alemana.

CC OO e Izquierda Unida-Iniciativa per Catalunya, por su parte, celebraron ayer una reunión conjunta para analizar la crisis de Seat. Ambas formaciones acordaron proponer que el Estado tome una participación en el capital de la empresa automovilística para tener así una posición de control,informa Concha Martín. También decidieron pedir al Gobierno que haga público el contrato de venta de Seat a Volkswagen ante "los rumores" de que se impusieron claúsulas secretas que "ya preveían la situación que se está produciendo ahora", según manifestó el vicepresidente del grupo parlamentario de IU en el Congreso, Rafael Ribó.

Ribó explicó que la toma de una participación estatal en empresas en crisis "es algo que se está haciendo en Europa" y puso como ejemplo la presencia del Gobierno holandés en el fabricante de camiones DAF y la del Gobierno de la Baja Sajonia en Volkswagen.

Los sindicatos fueron ayer muy prudentes a la hora de enjuiciar la decisión tomada por Volkswagen. UGT aún no se había pronunciado al cierre de esta edición y el secretario general del metal de CC OO en Cataluña, Simón Rosado, manifestó a este diario que el sindicato "no participará en una comisión que aboque al cierre de la factoría de la Zona Franca". Rosado afirmó que los sindicatos no han recibido aún "ninguna comunicación oficial de los planes de VW para la Zona Franca".

Para el dirigente sindical, "sólo nos pondremos a negociar si está garantizada la salvación de SeatZona Franca como grupo y con un proyecto industrial claro". El sindicalista subrayó que Volkswagen no ha planteado nada a nivel oficial sino que "la multinacional está haciendo una fuerte presión para plantear medidas muy duras desde el primer momento en que se inicien las negociaciones". Según Rosado, las instalaciones de la Zona Franca son "viables por lo que CC OO ni se plantea el cierre. Lo que queremos es renegociar una salida digna para todos".

Reuniones con Volkswagen

Los representantes del comité de empresa de Zona Franca y de las secciones sindicales de Comisiones Obreras y UGT sostuvieron anteanoche y ayer diversas reuniones con la dirección de Volkswagen para encontrar una salida a la crisis.

En estos encuentros se materializó el proyecto de poner en marcha un comité de 12 notables destinado a estudiar medidas que palíen los efectos del cierre de la producción de coches en Zona Franca, según confirmaron medios del grupo automovilístico y de la Generalitat. Para formar parte de este comité se barajan los nombres del director general de Industria de la Generalitat, Miquel Puig; del profesor del IESE y especialista del sector, Pedro Nueno, y del teniente de alcalde del Ayuntamiento de Barcelona, Joan Clos, además de los representantes de UGT (Enrique Montoya), de CC OO (Alfonso Rodríguez), y de la empresa (Peter Walzer y, probablemente, Arriortúa). Junto a ellos trabajará Juan Llorens, que se perfila como la persona que dirigirá Seat en esta nueva etapa.