La fiscalía de Miami prepara el procesamiento de Raúl Castro por presunto delito de tráfico de drogas
La Fiscalía Federal de Miami prepara un sumario para el procesamiento de Raúl Castro, hermano del presidente cubano, Fidel Castro, y ministro de Defensa, por tráfico de drogas. El diario Miami Herald publicó el pasado jueves esta información, en la que también están implicados otros 14 miembros del Gobierno de la isla. Según la información del citado periódico, los altos cargos cubanos son los principales responsables de la entrada, en Estados Unidos de toneladas, de cocaína, procedente de Colombia, a través de Cuba. En el documento, de 17 fólios, que leyó uno de los redactores de Miami Herald, no se especifica la relación de Fidel Castro con los hechos.Los defensores públicos; norteamericanos llevan meses recogiendo información para implicar al Gobierno cubano, pero hasta ahora no contaban con suficientes pruebas para enviar su investigación a un gran jurado. A pesar de los testimonios implicatorios, la Fiscalía Federal deberá contar con la autorización gubernamental antes de enviar el documento al alto tribunal, un proceso que puede durar meses. Según las autoridades norteamericanas, el ministro del Interior, Abelardo Colomé Ibarra; el anterior director del departamento americano del partido comunista, Manuel Piñeiro; el general Nelson Blanco y la capitana Rosa María Abierno son algunos de los implicados.
La iniciativa federal que se ultima en estos días es similar a la que concluyó en la invasión de Panamá. Las tropas norteamericanas invadieron el país centroamericano para llevar ante sus tribunales al general Manuel Antonio Noriega, que, tras ser condenado, cumple condena en una cárcel estadounidense. Precisamente han sido los testimonios implicatorios sobre Raúl Castro en la vista del juicio contra Noriega los que sirvieron como punto de partida para la investigación de la Fiscalía.
A partir de ahí se comenzaron a relacionar casos archivados que apuntaban hacia una conexión cubana en el tráfico de drogas, y con sigilo se comenzó a tomar testimonio a traficantes encarcelados y a exiliados cubanos.
