Médicos y hemofílicos dicen que no se pudo evitar el contagio del VIH con productos derivados de la sangre

No había ninguna posibilidad de controlar antes de 1985 la presencia del virus del sida en los productos usados para el tratamiento de los hemofílicos. Así de contundente se muestra el doctor Manuel Magallón, jefe del servicio de hemofilia del hospital La Paz, de Madrid, con respecto a las acusaciones de negligencia vertidas por el Sindicato Médico de Madrid contra la Administración sanitaria.Este sindicato afirma que el 41% de los hemofílicos españoles han sido infectados con el VIH porque no se siguieron las recomendaciones internacionales de calentar la sangre para neutralizar el virus. Dos hemofílicos presentes en la sede que la federación tiene en ese hospital, y que prefieren mantener su anonimato, afirman que los datos del informe elaborado por ese sindicato "son mentira", pero rechazan ampliar sus manifestaciones dado que la Real Fundación Victoria Eugenia, que agrupa al colectivo de hemofílicos con VIH, celebra hoy una junta directiva con las asociaciones de toda España para hacer pública su postura oficial.

La denuncia del sindicato médico ha encontrado amplio eco en el Partido Popular, que sitúa en 1983 las recomendaciones de EE. UU sobre los hemoderivados. Ese año fue aislado por primera vez el virus del sida por el investigador francés Luc Montagnier.

Sospechas sin certeza

"Hasta 1985, los datos que había eran experimentales, se sospechaba, pero no se tenía la certeza", afirma el doctor Magallón. El único tratamiento de la hemofilia consiste en concentraciones de plasma y minimizamos los tratamientos lo más que se pudo, pero no se pueden suspender. Es la única terapéutica que hay. Eso o dejar a los enfermos que se desangren con su hemorragia", enfatiza este especialista. El alto índice de contagio se debe, a su juicio, a los riesgos de un buen tratamiento: "Usamos un producto muy purificado, y para ello se necesita plasma de varios donantes. Esto aumentó el riesgo de forma inesperada. ",concluye Magallón.La doctora Carmen Echave, autora del informe difundido por el sindicato médico, afirma en una carta abierta al ministro que en 1983 el Centro de Control de enfermedades Infecciosas de Atlanta (CDC) registró 22 casos de sida en hemofílicos, cuatro de ellos europeos y tres en Sevilla". El fallecimiento de dos de estos afectados fueron atribuídos por Sanidad a "desnutrición", afirma Echave.

El doctor Mendiavilla, hematólogo en el clínico San Carlos, de Madrid, y citado por la doctora Echave como una de sus fuentes de referencia para la elaboración del informe manifestó a EL PAÍS que "no se consideraba la persona más adecuada para valorar el problema de los hemofílicos", dado que había tratado a pocos de estos pacientes. "El grupo más grande esta localizado en La Paz", dijo. Con respecto a la disponibilidad de reactivos para detectar el virus, Mendiavilla se limitó a afirmar que "existian en el comercio internacional cuando se empezó a conocer la identidad de los portadores". Antonio Rivas, responsable del sindicato médico de Madrid, lamenta, por su parte, que el "tema está desvariando", en clara referencia al cruce de acusaciones entre el Partido Popular y los responsables sanitarios.