González promete expulsar del PSOE a quienes se hayan lucrado personalmente del poder

Felipe González se comprometió ayer a expulsar del PSOE y apartar del poder a cualquier militante socialista que se haya enriquecido personalmente por su posición política o información privilegiada. El líder socialista descalificó a quienes han cobrado comisiones por adjudicaciones de contratos de la Administración con una dureza que no había mostrado la víspera un comunicado de la dirección del PSOE. Mientras en éste se aducía que el partido no es responsable de los negocios de sus militantes, González arremetió no sólo contra quienes se lucran ilegalmente, sino "indebidamente", desde una óptica socialista.

El presidente del Gobierno prometió esta limpieza durante una conferencia de prensa conjunta con el presidente de Costa Rica, Rafael Calderón. González se apresuró a anunciar que, por de pronto, ha iniciado una investigación para comprobar si efectivamente un ex director general de su gabinete presidencial, Florencio Ornia, se ha beneficiado de su proximidad al Gobierno para realizar tráfico de influencias.Según una investigación judicial, Ornia constituyó poco después de abandonar su trabajo en La Moncloa, en 1989, una empresa que cobró comisiones de la multinacional Siemens adjudicataria de obras relacionadas con el AVE.

De otro lado, este diario publicó el pasado lunes que la empresa GMP, propiedad de Juan Carlos Mangana -ex empleado de la ejecutiva federal del PSOE- y Sotero Jiménez, cobró 803 millones de pesetas de comisión de Siemens, y que Tecnología Informática 2020, dirigida por la ex coordinadora de finanzas del PSOE Aida Álvarez, percibió al menos 21 millones de la misma multinacional.

Cuestión de horas o días

González adelantó incluso que su investigación podría concluir en las próximas horas, o en muy pocos días. "Pero además" anunció, "voy a aplicar las reglas que he propuesto que sean de aplicación inmediata para nosotros [en alusión a los socialistas], con independencia de las normas legales".

"Si llego a tener constancia de que alguna persona aprovecha su proximidad al poder, al Gobierno o al partido para lucrarse personalmente aprovechando su relación con la Administración", añadió, "lo que propongo es que salga inmediatamente de la organización del partido y de cualquier relación con nosotros".

González rehuyó pronunciarse sobre "si se ha cometido algún error", si tal error constituiría un delito y si la sanción procedería del Código Civil o del Código Penal.

En cambio, quiso mostrar como un elemento "tranquilizador" para la opinión pública que el sistema de incompatibilidades en vigor es bastante severo, a su juicio. Emplazado por las acusaciones concretas de tráfico de influencias sobre personas próximas al poder socialim lazdnc-syssta, aprovechó para proclamar que está dispuesto a endurecer el régimen de incompatibilidades de quienes trabajan en la Administración. Y apeló a que ha sido el PSOE quien ha regulado como delito el tráfico de influencias.

Pero, con todo, lo que quiso dejar claro es que debe ser apartado del PSOE cualquiera que haya convertido la política en un negocio personal. "Separaré de toda proximidad, y desde luego de toda pertenencia al partido, a cualquiera que haga un aprovechamiento personal, no digo ya ilegal, sino un aprovechamiento indebido desde el punto de vista del comportamiento exigible a un militante socialista".

Una respuesta a la que González quiere dar también el cariz de un "aviso para navegantes`, en el sentido de que los empresarios sepan que no por concertar los servicios de personas próximas al poder tienen garantizada la adjudicación de contratos con la Administración.