La posible muestra de pinturas de Hitler en Florencia irrita en Alemania

La noticia de que podrían llegar a ser exhibidas en la Galería de los Uffizi, en Florencia, las 20 acuarelas pintadas por Adolf Hitler entre los años 1908 y 1913, cuando en su juventud, en Viena, trató infructuosamente de ser admitido en la Academia de Bellas Artes, ha levantado una inmediata polémica en Alemania. El senador de Cultura de Berlín, Ulrich Roloff-Momin, en una carta al alcalde de Florencia, Giorgio Morales, la consideró "una intolerable provocación al buen gusto y a las víctimas del fascismo". El alcalde de Florencia se ha apresurado a desmentir que las acuarelas vayan a exponerse en los Uffizi, donde se encuentran depositadas, según recoge el diario La Repubblica: "¿Exponerlas en los Uffizi? ¿Pero quién ha dicho eso? No se expondrán, aunque sí estarán a disposición de los estudiosos".

El presidente del Consejo de los Judíos en Alemania, Ignatz Bubis, fue mucho más práctico y amenazó a la ciudad italiana de Florencia con que ningún turista judío la visitaría en el futuro si los cuadros de Hitler cuelgan de las paredes de los Uffizi.

Ayer se ofrecieron en subasta en Trieste las veinte acuarelas de Hitler, que no hallaron comprador. El precio de salida era de 28 millones de pesetas por todo el lote, informa Peru Egurbide. La más significativa de las acuarelas representa la Hofbraühaus de Múnich, la famosa cervecería desde la que Hitler lanzó el fracasado golpe de Estado en 1923. Las acuarelas de Hitler, que representan paisajes y edificios, han sido calificadas por los críticos como "mediocres postales".

Stephen Cristea, el subastador encargado de la puja en Trieste, ha declarado: "Son razonablemente decorativas. Cruzaría la calle para mirarlas sin curiosidad, pero no iría más lejos". El historiador Carlo Giulio Argan, fallecido la semana pasada, también despreció en su momento las acuarelas de Hitler: "Su único valor reside en el hecho de que muestran cómo un dictador puede ser también un imbécil".