"La situación en EE UU de negros e hispanos con sida es de 'genocidio gentil"

"La situación de los pacientes con sida es muy difícil. Los homosexuales blancos ricos pueden pagar un centro privado, pero los que no tienen dinero, los homosexuales negros e hispanos y, sobre todo, drogadictos y mujeres que han contraído la infección por vía parenteral tienen que recurrir a hospitales de beneficencia. Ya sabemos que van a morir, pero esto no justifica que esos centros retrasen los nuevos tratamientos y otras alternativas que pueden paliar su sufrimiento. Muchos negros consideran que es una forma de asesinato, de diezmar una población, y creo que algunos latinos tienen también esa sensación. Personalmente, creo que existe la posibilidad real de que esa población sea eliminada, pero no hablaría abiertamente de genocidio, aunque el fondo del problema es ése. Yo lo llamo genocidio gentil", explica Milton Terris, que ha participado en Madrid en unas jornadas sanitarias organizadas por Izquierda Unida (IU).El problema más angustioso para este especialista es el de los pacientes psiquiátricos crónicos. "Los enfermos de sida se han organizado en asociaciones para afrontar el problema, pero los enfermos mentales, generalmente jóvenes esquizofrénicos y ancianos con demencia senil, no tienen fuerza alguna", afirma.

Terris señala que se está procediendo sistemáticamente a darles el alta con la excusa de que "serán atendidos en hospitales de día, pero en realidad sólo se persigue un ahorro de costes". "A los enfermos no se les ofrecen posibilidades reales, y hay de uno a tres millones de norteamericanos que no tienen familia, empleo ni vivienda y padecen trastornos mentales", añade.

Esta situación de inasistencia sanitaria a los sectores más necesitados de la población ha llevado a varios colectivos y grupos profesionales a pedir un sistema público de salud. Un debate que no cuenta, a su juicio, con el interés de la clase política.

Milton Terris, editor de la revista Journal of Public Health Policy, no está sorprendido por las propuestas del informe Abril para reformar la asistencia sanitaria en España: "En marzo de 1990 participé, invitado por el Ministerio de Sanidad y Consumo, en un encuentro con expertos internacionales, y ya entonces se vio claramente la tendencia privatizadora de la Administración".

El coste de privatizar

"Lamento tener que decir que el informe Abril aparece como una reducción al absurdo de la estrategia privatizadora. No sólo se pretende privatizar las actividades de asistencia médica, sino además las preventivas", afirma.Sus predicciones, de llevarse a cabo esa privatización, apuntan a un aumento desmesurado de los gastos: "Yo he calculado que en España se pasaría del actual 6% del producto interior bruto [PIB] a un 8% o 10%". Este aumento no redundará, a su juicio, en una mejora de la calidad de la asistencia. "En EE UU gastamos actualmente el 12% del PIB y hay 37 millones de norteamericanos que no tienen seguro médico en sus empresas. Otros siete millones de ciudadanos no pueden optar ni siquiera a la asistencia de beneficencia, porque antes de ingresar en un hospital tienes que demostrar con un cheque o una tarjeta que puedes pagar si la Administración no se hace cargo de los costes", concluye Terris.