González califica de "prácticamente inviable" el envío de tropas

IGNACIO CEMBRERO ENVIADO ESPECIAL, El presidente Felipe González ya adelantó ayer al mediodía, poco antes de iniciarse las reuniones convocadas en La Haya sobre la crisis yugoslava, que resultaba "prácticamente inviable" el envío al país balcánico de una fuerza de paz de la Unión Europea Occidental (UEO), propuesto por la actual presidencia holandesa de la Comunidad Europea (CE) y respaldado, con matices, por el jefe de Estado francés, François Mitterrand, y por el canciller Helmut Kohl.

González hizo esta valoración en una breve conferencia para la prensa española al término de una entrevista de una hora que mantuvo con Kohl antes de viajar a Berlín, donde asistió a la reunión del Presídium de la Internacional Socialista. No se trata -aclaró de entrada y refiriéndose a la proposición holandesa- "de una fuerza de intervención en el conflicto interno" yugoslavo, sino "estrictamente de una fuerza de paz y su objetivo es facilitar el desarrollo de la conferencia" que patrocina la CE en La Haya y preside el británico lord Carrington. "No es una fuerza para el restablecimiento de la paz utilizando la fuerza".Para que pueda decidirse su envío por la UEO, la única organización europea competente en materia de defensa, deben, por tanto, cumplirse unas determinadas condiciones, como su aceptación por todas las partes y el cumplimiento del alto el fuego que, a pesar del último acuerdo logrado por Carrington, "no se dan", según González. "Si se dieran las condiciones, habría una inclinación a hacer un mayor esfuerzo" por parte de los Doce, que ya han enviado a Yugoslavia 200 observadores.

Aunque insistió en que "hay que dar una oportunidad a la conferencia de paz por pequeña que sea", el jefe del Ejecutivo español dio casi por fracasado el proceso iniciado en La Haya: "Si fracasa, ojalá no fracase, pero cuando fracase y se constate que no es posible, en ese momento diré cuál es la posición del Gobierno" respecto a reconocer la independencia de Eslovenia y Croacia. González criticó de forma velada hace cinco días en París la amenaza alemana de establecer unilateralmente relaciones diplomáticas con esas dos repúblicas secesionistas, pero ayer recogió velas. En caso de ruptura de la conferencia, el Gobierno español "intentará que su postura sea europea", dijo antes de añadir: "Y creo que Alemania también" se atendrá a la posición común.

El presidente aseguró, por último, haber detectado malinterpretaciones de la declaración franco-alemana sobre Yugoslavia. Sus autores, Mitterrand y Kohl, ponen también condiciones, resaltó González, para destacar tropas a Yugoslavia, y estos requisitos no se cumplen.

En Bonn, el jefe del Gobierno reiteró el voto de confianza que dio en París a una Alemania que, se sospecha en varias capitales europeas e incluso en el seno del Gobierno español, se desinteresa de la construcción comunitaria para dedicarse prioritariamente a estrechar lazos con su antigua zona de influencia en Centroeuropa. Tras una entrevista "intensa y extraordinariamente cordial, característica de la relación con Kohl", González coincidió con su anfitrión en considerar "absurdo contraponer la profundización y ampliación de la CE", porque la esperanza de las jóvenes democracias europeas es "que la Comunidad funcione", y para eso es necesario que en la cumbre de Maastricht (Holanda) en diciembre se apruebe la unión política y la económica y monetaria "con contenidos equilibrados y serios".

Dio un paso hacia las tesis alemanas al preconizar, por primera vez, que -además de negociar con Polonia, Hungría y Checoslovaquia tratados de asociación a la CE que pueden ser "un instrumento hacia su plena adhesión"- hay que "perfeccionar las fórmulas de coordinación política para dar a estos países una respuesta a sus angustias o necesidades, contando con ellos a la hora de tomar decisiones".

Contingente español

Por otra parte, fuentes militares indicaron ayer en Madrid que España enviaría un máximo de 800 hombres a la hipotética fuerza multinacional de interposición en Yugoslavia, de momento congelada por la Unión Europea Occidental. Dichas fuentes señalaron que el contingente español estaría integrado por soldados y cuadros voluntarios seleccionados entre las unidades de élite, como la Legión y la Brigada Paracaidista, por lo que difícilmente podría superar la citada cifra. Los militares llevarían sólo armamento ligero, informa Miguel González. El ministro de Defensa español, Julián García Vargas, indicó ayer en Madrid, poco antes de partir hacia La Haya, que Ia iniciativa ante el conflicto yugoslavo tiene que ser eminentemente diplomática".