Los vieneses votan en contra de la Expo 95 Viena-Budapest
El 65% de los vieneses votó el miércoles en contra del proyecto Expo 95 Viena-Budapest, para el que ya se habían comenzado los trabajos de construcción a orillas del Danubio. En la consulta realizada en la capital austriaca participó un 44% de los 1,13 millones de sus habitantes con voto, y los sorprendentes resultados fueron una ducha fría para el Gobierno de coalición austriaco (socialdemócratas y democristianos), que tuvo que reconocer que había ganado "la palabra de la democracia directa".Mientras en la Bolsa de Viena bajaban las acciones de las empresas constructoras que tomaban parte en el proyecto, reinaba un desconcierto total en los grupos de trabajo, comisiones de planificación, infraestructura, mercadotecnia y espectáculos creados hace dos años para la exposición.
La Expo 95 se creó con el concepto Puentes hacia el futuro, presentando a Viena como la metrópolis del Danubio que unía al Oeste con el Este, concepto que caducó cuando cayeron los regímenes comunistas. Se intentó entonces sin éxito crear subconceptos conmemorativos que no hicieron más atractiva la idea.. Viena, una ciudad que vive del turismo, pensaba ganar en los seis meses de la exposición las características de las ciudades rivales, lo cosmopolita de Berlín, lo místico de Praga y lo eficaz de Munich.
El comentarista del periódico Kurier Hans Rauscher comentaba ayer en primera página con ironía que "los vieneses no quieren proyectos gigantes, ni oleadas de criminales del Este, ni ruidos". En el primer distrito, la ciudad antigua, y en el segundo, colindante con el terreno de la exposición, los precios de los pisos han subido hasta en un 50%.
