La OMS responsabiliza al tabaco de la muerte de 35.000 españoles en 1990

La Organización Mundial de la Salud (OMS) achaca al tabaco el fallecimiento de 35.000 españoles en 1990. "Esto supone 15.000 casos más que los calculados para 1980 y refleja la tendencia alcista que va a continuar si no se toman medidas", afirma el director de. la región europea de la OMS, Jo Eirik Asvall, en una carta enviada recientemente al ministro de Sanidad y Consumo, Julián García Vargas.

Según las nuevas estadísticas, actualizadas por un grupo de expertos de la OMS, 13.000 de los 35.000 fallecidos tienen menos de 65 años. La misiva, enviada al ministro el pasado noviembre, considera que el tabaco es "la principal causa única de enfermedad y muerte prematura". Fuentes del Ministerio de Sanidad y Consumo consideran que esta carta es una ligera reprimenda de la OMS por no haber aprobado todavía, como se ha anunciado en repetidas ocasiones a lo largo de este año, el real decreto que restringe la publicidad directa o indirecta del tabaco, así como los patrocinios de actividades deportivas o la inclusión de los logotipos de las marcas de cigarrillos en otros productos. El retraso en aprobar esta normativa -anunciada ahora para el próximo mes de enero- se debe a la resistencia de sectores económicos muy fuertes, según señaló el propio ministro de Sanidad en el Senado el pasado noviembre.En referencia directa a esa normativa, Asvall le desea en su carta a García Vargas "todo el valor y coraje necesario para llevarla y cabo". El director de la oficina para la región europea de la OMS, que dejó de fumar hace 14 años, considera que las medidas propuestas en el proyecto de real decreto son "una solución global y efectiva del marketing de un producto que acaba provocando la muerte de uno de cada cuatro de sus usuarios".

Asvall afirma en su carta que todas las legislaciones contra el consumo de tabaco han demostrado ser efectivas si incluyen otras medidas como son mensajes a la población con claras advertencias sobre los riesgos para la salud.

El 36% de los españoles se consideran fumadores según una encuesta realizada en 1989 por encargo del Ministerio de Sanidad y Consumo para conocer los hábitos de vida de los españoles mayores de 16 años. Ese dato refleja un descenso de tres puntos con respecto a un estudio similar realizado en 1986, pero aun así Sanidad lo considera como "un descenso menor de lo deseable".

El anexo del texto del proyecto de real decreto incluye una serie de frases que, además de la ya habitual "el tabaco peirjudica su salud", serán incluidas en el etiquetado de los cigarrillos. Entre éstas figuran: "Fumar provoca cáncer y bronquitis crónica" y "Fumar perjudica a los que le rodean".