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Los nacionalistas bálticos se preparan a resistir las medidas de fuerza de Moscú

Pilar Bonet

La república báltica de Lituania se preparaba ayer para resistir a eventuales medidas de fuerza de Moscú, que podrían llegar en forma de orden decretada por Mijail Gorbachov o en forma de estado de emergencia, contra los movimientos independentistas. Temores similares han sido expresados desde Letonia y Estonia. Igual fundamento. pueden tener los temores, en opinión de observadores políticos, en las repúblicas de Moldavia, a juzgar por el último decreto presidencial, o de Georgia, cuyas autoridades han abolido de forma unilateral la república autónoma de Osetia del Norte.

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Shevardnadze, el soviético,

El sábado, Mijaíl Gorbachov promulgó un decreto en el que da 10 días a las autoridades de Moldavia para abolir un conjunto de leyes que han sido declaradas anticonstitucionales por el centro y disolver las repúblicas secesionistas del Dniester y de los gagauzos. Ambas fueron formadas respectivamente el 19 de agosto y el 2 de septiembre de este año por la población eslava y gagauza (turcos de cultura cristiana) que reside en Moldavia, como protesta por la política llevada a cabo por la mayoría moldava.Gorbachov ordenó también disolver todos los grupos voluntarios paramilitares formados en Moldavia y advirtió que si las directrices de su decreto no se cumplen se tomarán las "medidas necesarias" de acuerdo con las competencias constitucionales del presidente de la URSS.

El Congreso de los Diputados Populares de la URSS debe votar esta semana las enmiendas constitucionales que aseguran un mayor poder ejecutivo para el presidente. Estas enmiendas, sumamente controvertidas, pueden encontrar dificultades de quórum en el máximo Parlamento soviético, opinaban medios políticos este fin de semana, ya que para aprobarlas es necesario contar con dos tercios del Parlamento, formado por 2.250 diputados.

En vísperas de la dimisión del ministro de Exteriores, Edvard Shevardnadze, Gorbachov advirtió que, si los conflictos interétnicos siguen manteniendo su virulencia, se verá obligado a introducir la dirección presidencial o el estado de emergencia.

En Vilna, la capital de Lituania, el presidente Vitautas Landsbergis manifestó a una reunión de activistas del movimiento Sajudis que debían prepararse para la "resistencia" y las "medidas de autodefensa" si Moscú imponía la dirección presidencial. El presidente lituano instó a elaborar un programa a tal efecto, según la agencia oficial Tass.

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Landsbergis afirmó que las medidas de control desde el centro han sido ya introducidas sigilosamente. Las explosiones registradas últimamente en Riga, la capital de Letonia, han sido interpretadas por los medios independentistas como un pretexto para la intervención militar.

El temor a una acción de fuerza ha sido incrementado por la intervención del presidente del KGB, VIadimir Kriuchkov, ante el Congreso de los Diputados. En un tono que recordaba tiempos anteriores a la política de la perestroika, Kriuchkov lanzó serias advertencias a los movimientos independentistas y citó cinco repúblicas donde existen, según dijo, formaciones militares propias: Ucrania, Letonia, Estonia, Georgia Y Armenia.La televisión pide cambios

Por otra parte, la televisión soviética pidió anoche al presidente Mijaíl Gorbachov, en una inusual intervención de un locutor en el programa informativo Vremia, "una renovación radical del Gobierno". En el transcurso del programa, informa Efe, el locutor hizo una pausa en la presentación de las noticias y realizó un breve comentarlo sobre la situación del país, que concluyó diciendo: "Tenemos derecho a esperar del presidente no una revolución de terciopelo, sino una renovación radical del gabinete de ministros". Las palabras del locutor causaron sorpresa, ya que con la glasnoteste tipo de editoriales habían desaparecido.

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Sobre la firma

Pilar Bonet
Es periodista y analista. Durante 34 años fue corresponsal de EL PAÍS en la URSS, Rusia y espacio postsoviético.

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