Bush firma la ley más dura contra la polución atmosférica en la historia del país

El presidente de Estados Unidos George Bush, firmó hoy una novedosa ley de protección ambiental dirigida a reducir drásticamente las emisiones causantes de la contaminación en las ciudades, la lluvia ácida y el deterior de la capa de ozono.

La ley, aprobada por el Congreso el pasado día 27 tras quince meses de arduas negociaciones, someterá a estrictos controles a la mayoría de las empresas del país, entre ellas las fábricas siderúrgicas, las centrales energéticas y las gasolineras. Los fabricantes de automóviles tendrán que fabricar vehículos de bajo consumo y a la industria petrolera deberá ofrecer una gasolina menos contaminante, con etanol. Hacia el año 2000, todas la empresas deberán haber suspendido el uso de clorofluorocarbonos (CFE), unos de los gases causantes del llamado efecto invernadero, consistente en el excesivo calentamiento de la Tierra, y sobre todo, de la destrucción de la capa de ozono que envuelve al planeta.

Aire limpio

Bush decidió firmar el texto, bautizado como 'Ley de Aire Limpio', a pesar de las grandes Industrias y algunos economistas advirtieron que su aplicación tendrá efectos desfavorables en la economía y acarreará la pérdida de miles de puestos de trabajo.La puesta en vigor de la ley costará a cada contribuyente estadounidense cien dólares anuales hacia 1995, a consecuencia de la subida del precio de los carburantes, los automóviles y otros bienes de constimo, calculan los especialistas. Según algunos sectores contrarios a la ley, miles de personas perderán sus empleos a causa de las restricciones impuestas por la nueva normativa y el consiguiente cierre de empresas.

La defensa que ha hecho Bush de leyes más estríctas contra la contaminación han supuesto una ruptura con las políticas de su predecesor, Ronald Reagan, que llegó a afirmar que los árboles eran culpables de muchos de los problemas de contaminación parajustificar su postura obstruccionista a modificar la legislación.