El autotrasplante, cada vez más eficaz

El autotrasplante de médula ósea se ha revelado en los últimos anos como una esperanzadora solución para aquellos casos en que no es posible el trasplante de donante por problemas de histocompatibilidad. Consiste en someter al paciente a un agresivo tratamiento que haga remitir el cáncer hasta su mínima expresión posible. En ese momento se extrae la médula ósea y se la somete a u«n tratamiento de choque para eliminar los restos de células cancerígenas que puedan quedar en ella. Una vez purificada la médula extraída, vuelve a implantarse en el paciente para que genere sangre libre de cáncer.El hospital Clínico de Barcelona inició su programa de autotrasplante de médula ósea en 1983, pero obtuvo su impulso definitivo cuando en 1986 el hospital firmó un proyecto conjunto de investigación con el Fred Hutchinson Cancer Research Center de Seattle (EE UU), pionero en esta técnica médica. El programa fue financiado por el Comité Conjunto Hispano Norteamericano de Investigación Científica.

El programa ha realizado desde entonces 250 autotrasplantes de médula, de los cuales 70 se han realizado en Barcelona, según Albert Grañena jefe de la unidad de trasplant de médula ósea del hospital Clínico. Entre esos 250 figura precisamente el practicado al tenor José Carreras, que sufrí una leucemia linfoblástica, en noviembre de 1987.

Los riesgos de la famaAunque en el citado hospital ya se habían realizado con éxito varios autotrasplantes, el equipo del doctor Grañena decidió aconsejar a Carreras que se operara en Seattle, para evitar que gravitase sobre el programa del Clínico la enorme tensión que representaba un caso tan famoso y los éxitos obtenidos por el programa quedasen empañados por el posible fracaso de un caso de amplia repercusión. Carreras estuvo de acuerdo y la intervención se hizo en Seattle, pero en ella intervino muy directamente el equipo de¡ hospital Clínico.

"Los resultados del autotrasplante son muy buenos", afirma Albert Grañena. "En estos momentos, entre el 50% y el 60% de los pacientes no presenta recidiva del cáncer a los dos años de la operación. El autotrasplante comenzó a aplicarse en los casos de leucemias linfoblásticas, pero muy pronto se utilizó también en los otros tipos de leucemias. Ahora, el autotrasplante está teniendo resultados espectaculares en los linfomas e incluso en algunos tumores sólidos, como el cáncer de mama o de pulmón, en el sarcoma de Ewing (cáncer de huesos), y en los tumores de riñón, testículos y ovarios". Particularmente esperanzadores son los resultados obtenidos en el hospital de Sant Pau en casos de cáncer infantil, especialmente en los neuroblastomas.