17 horas

Todo comenzó en el restaurante Arzak a las 14.00 horas del viernes. Estaban reunidos los siete directores de cine que formaban el jurado internacional del festival: José Luis Borau, de España; Charles Burnett, de Estados Unidos; Román Chalbaud, Venezuela; Nelson Pereira, Brasil; Víctor Prokhorou, URSS; Axel Corti, Austria, y Ken Loach, de Gran Bretaña. Lo habitual habría sido que a la hora de la digestión hubiera llegado a acuerdo sobre los premios. Pero no fue así.Acabada una larga y tensa comida, siguieron reunidos, esta vez, en el hotel María Cristina. Les dieron cerca de las tres de. la madrugada y continuaban sin llegar a acuerdos. Se fueron a Oormir y, a las nueve de la mañana del sábado, siguieron hasta el mediodía en que, tras tres reuniones con la dirección del festival, llegaron al polémico e inhabitual fallo, con nota introductoria de justificación y contra nota de réplica de la dirección del festival.

Durante 17 horas, Axel Corti y Ken Loach mantuvieron un férreo antiamericanismo para que Muerte entre las flores, de los hermanos Cohen, no se llevara la Concha de Oro. Otros miembros estaban a favor y eran partidarios de, si no salía este filme, dejar esa concha desierta.

Al final, presionados por la dirección del Festival con el argumento de que "el jurado internacional tiene la obligación de aprobar los premios que manda el reglamento", decidieron redactar la siguiente declaración como preámbulo a los premios: "Este Jurado ha sido obligado por la dirección del Festival a otorgar cinco premios. Sólo por esta razón, y no por unanimidad, la decisión del jurado es...".