Gorbachov defiende la economía de mercado, pero rechaza el capitalismo
El presidente de la URSS y secretarlo general del partido comunista (PCUS), Mijaíl Gorbachov, defendió ayer la política de perestroika, el paso rápido a una economía de mercado sin caer en el capitalismo, y la transformación de la URSS en una unión de Estados soberanos. Abría así en el Kremlin con un discurso centrista moderado, de dos horas y media, el 28º Congreso del PCUS.La intervención del líder soviético, que decepcionó a los reformistas más radicales, registró también un balance del trabajo de los órganos dirigentes del PCUS. Posteriormente, los miembros del Politburó, a razón de 20 minutos cada uno, comenzaron a hacer balance de su actividad en los órganos dirigentes del PCUS.
Muy emotiva fue la intervención del responsable de ideología, Alexandr YákovIev, quien dijo que no tiene ambición política y que éste es su último congreso comunista.
Gorbachov se refirió a los errores del Politburó y de la dirección política en general, y dijo que o la URSS avanza por el camino de la reforma o las fuerzas contrarias a la perestroika vencerán, en cuyo caso al pueblo y al país le esperan "tiempos sombríos".
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Gorbachov, por una "unión de Estados soberanos"
Viene de la primera páginaEl capítulo consagrado al problema de las nacionalidades fue el más autocrítico. Gorbachov dijo que en un principio la política soviética sobre nacionalidades se basaba en las decisiones del 27º congreso del PCUS y que, a juzgar por los documentos del foro celebrado en 1986, las relaciones interétnicas se desarrollaban normalmente". Pero poco tiempo después surgieron problemas para los que "no estábamos preparados". "No comprendimos de inmediato el peligro de los conflictos interétnicos y adoptamos una posición pasiva ante ellos. Esto fue aprovechado por los separatistas, nacionalistas, elementos corruptos y otras fuerzas destructivas. La experiencia que ahora tenemos nos ha llevado a la conclusión de que la transformación de la URSS no se puede limitar a una ampliación de los derechos de las Repúblicas y autonomías. Necesitamos una auténtica unión de Estados soberanos".
Libertad para el Este
En política exterior, el balance fue muy positivo. Aquí Gorbachov respondió claramente al discurso del general Albert Makashov en el congreso de los comunistas rusos. "Hay quienes están descontentos porque dejamos los países de Europa central y del Este sin combatir. Condenamos decididamente semejantes declaraciones. Los pueblos de estos países quieren libertad de elección y nosotros respetamos ese derecho", señaló.
Al analizar los sucesos de Europa del Este, dijo Gorbachov, a veces hablan del fracaso del socialismo, pero hay que preguntarse qué socialismo ha fracasado. "Allí, los pueblos rechazaron el modelo estalinista de socialismo y es asunto interno de ellos qué camino elegirán ahora. Pero independientemente del camino que elijan, la URSS está dispuesta a mantener relaciones de buena vecindad con los países de Europa oriental", afirmó.
En el capítulo dedicado a la situación interna en el partido, Gorbachov dijo que la perestroika era la continuación pacífica de la Revolución de Octubre. Por lo tanto, decir que la perestroika es un experímento, que alguien ha impuesto es incorrecto. Se trata de una exigencia de la realidad misma. "Nuestro objetivo es un socialismo humano y democrático".
El partido, dijo Gorbachov, debe representar una sucesión voluntaria de correligionarios, expresar los intereses de todas las clases sociales, actuar en los marcos de la "elección socialista y de la perspectiva comunista". El líder esquivó la elección entre una forma de partido de "vanguardia" y un partido "parlamentario", decantándose por la unión de estas dos características.
En las relaciones con otros partidos, el PCUS se pronuncia por la colaboración con todos los de orientación progresista, socialistas y socialdemócratas. El PCUS debe ser un partido estatal, afirmó el líder, que se opone al principio de organizar un partido de carácter federativo. "Es importante que ni un solo partido comunista se eleve sobre otro, que no tenga posibilidades de imponer su voluntad". Tal afirmación supone dar la primacía al Comité Central del PCUS. En una reunión con los delegados al congreso, Borís Yeltsin, presidente del Parlamento de Rusia, había dicho el sábado que "el Cómite Central no debe tener el derecho de anular las decisiones de los partidos de las Repúblicas". Yeltsin no hizo ayer comentarios sobre la intervención de Gorbachov, pero medios próximos a este político se mostraban desconteptos por el tono del secretario general y señalaban que con tal discurso el partido iba a continuar perdiendo militantes, tal como viene sucediendo en la actualidad.
Gorbachov estuvo totalmente en contra de la despolitización de las estructuras estatales, empezando por el Ejército, el KGB y la policía. Además, se mostró partidario de conservar las organizaciones del partido en las fábricas e instituciones. Asimismo, se opone a la existencia de fracciones en el PCUS. Sobre las estructuras de los órganos superiores del partido, Gorbachov admitió que la mayoría es partidaria de conservar el puesto de secretario general, que debe elegirse en congreso, a diferencia a la práctica anterior, cuando era elegido por el Comité Central.
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