Oferta de un trono para el ex campeón Jorge de Bragation

15 abr 1990 - 00:00CEST

Una bandera blanca con dos franjas rojas y negras que se cruzan detrás de una corona es el estandarte del Partido Monárquico Conservador de Georgia, que ha enviado una misiva al ex campeón de España en diversas modalidades de automovilismo Jorge de Bragation, uno de los descendientes de la familia real georgiana residente en España, inquiriendo si estaría interesado en el trono, en caso de que esta república soviética llegara a ser en el futuro una monarquía constitucional.Temuri Zhorzholiami es el presidente de este partido fundado en abril de 1989, integrado en el Foro Nacional de Georgia y formado por 7.000 afiliados, según Zhorzholiami y varios miembros del Consejo de Regencia con quienes habló EL PAÍS en Tbilisi.

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La monarquía georgiana, cuyo último rey fue Heráclito II, dejó de existir cuando el reino del Este de Georgia fue anexionado por Rusia en 1801. Los descendientes de la familia Bragationov se exiliaron, y algunos vivieron en la corte de San Petersburgo. El partido monárquico publica una foto de Jorge de Bragation y un árbol genealógico donde se demuestra, según dicen, que éste es el heredero del trono georgiano.

Educar al primogénito

Los contactos con los Bragrationov españoles han pasado hasta ahora por un representante de la casa de los Romanov. VIadimir Kirilov Romanov es tío político de Jorge de Bragration, nos dicen, por su matrimonio con Leonida Georguievna Bragation.

Jorge de Bragation no ha respondido aún, señala Zhorzholiami, al mensaje de los monárquicos georgianos, que además le ofrecían educar a su primogénito en Tiflis. El patriarca de la Iglesia georgiana, Ilia II, aseguran nuestros interlocutores, está de acuerdo en encargarse de ello.

El partido monárquico está en contra de las elecciones dentro del sistema soviético. Lo que ningún interlocutor en él nos cuenta es que hace poco el periódico Tbilisi publicó una carta de 19 emigrantes georgianos y sus herederos, entre las que estaba la firma de Bragat Bragationov desde Madrid.

La carta invitaba a los georgianos a participar en las elecciones, y consideraba que éstos eran los primeros comicios "parcialmente libres" desde que el Ejército Rojo ocupó la república en 1921. "Nuestro movimiento es conservador. En el fondo, cada georgiano es monárquico, porque es conservador", dice Temuri Zorzholiami, presidente del Partido Monárquico Conservador.

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