"Sería prevaricar"

El asesor para asuntos taurinos del ministro del Interior, Carlos Briones, comenta que, como aficionado, tiene la certeza de que Victorino Martín no afeita toros, aunque también tiene la certeza de que todos los dictámenes de astas que se efectúan en la Escuela Nacional de Sanidad son de una fiabilidad absoluta, y los facultativos que los realizan, de una profesionalidad acreditada. "Una vez establecidas estas premisas", añade, "he de dejar claro que el ministerio no puede hacer la manifestación pública que pide Victorino, pues si consideramos irreprochables los dictámenes, decir lo contrario para su caso sería prevaricar".

Respecto a una presunta comisión de Interior que iría a la ganadería de Victorino Martín investigar, explica Briones: "Tuve una amplia entrevista con él y le dije lo mismo que ahora manifiesto a EL PAÍS: mi convicción de que no afeita y mi confianza total en los dictámenes de la Escuela Nacional de Sanidad. En el transcurso de la conversación propuso lo de la comisión, le dije que, a mi juicio, sería inoperante, pues, ¿qué iban a descubrir a estas alturas en su ganadería los comisionados? Mi posición fue la de conciliador. Sería una lástima que tan extraordinario ganadero como es Victorino no lidiara en España, y lo que más me podría satisfacer sería que se diera la mano con Manuel Sanz —otro estupendo profesional—, terminaran los malos entendidos y se reemprendiera la temporada con normalidad".