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Asuntos Sociales cambiara su criterio sobre las subvenciones derivadas del IRPF

Francesc Valls

El Ministerio de Asuntos Sociales modificará sus criterios para conceder subvenciones correspondientes a la asignación tributaria del impuesto sobre la renta de las personas físicas (IRPF), en el capítulo dedicado a entidades de fines sociales, que este año ha generado una polémica con Cáritas, asociación perteneciente a la Iglesia católica que se ha considerado discriminada.

Carlota Bustelo, subsecretaria del citado ministerio, manifestó a este diario que en la nueva modalidad se va a subvencionar por sectores de atención -tercera edad y toxicómanos, entre otros- en lugar de conceder ayudas directamente a las entidades de fines sociales, tal como ha ocurrido este año. Las distintas asociaciones, en la nueva orden ministerial, pugnarán entre ellas para conseguir que les sea concedido el programa."Lo ideal", afirma la subsecretaria, "sería que en enero se pudiera hacer la convocatoria, aunque puede retrasarse debido a la celebración de las elecciones". Cruz Roja va a aparecer expresamente mencionada en esa orden ministerial que regulará el IRPF, tal como sucedió en la última convocatoria para la distribución de fondos. Carlota Bustelo se extendió en las declaraciones hechas el pasado 27 de septiembre por la titular del departamento, Matilde Fernández, quien dijo que deberían encargarse estudios jurídicos sobre la distribución de esos fondos. La subsecretaria negó que existiera discriminación de la asociación humanitaria católica. "Hemos considerado que las asociaciones religiosas debían beneficiarse de la asignación tributaria; Cáritas ha armado tanto revuelo que otras asociaciones han dicho que quizás no esté tan claro el hecho de concederles subvención", dijo Bustelo.

Necesidades sociales

"Tanto Cáritas como otras entidades están cubriendo necesidades sociales", añadió. No obstante, "los estatutos de Cáritas deberán ser objeto de análisis por parte de los juristas, para contribuir a aclarar la situación", dijo Carlota Bustelo. Cáritas recibió 63,7 millones de pesetas de los 7.600 millones que distribuyó Asuntos Sociales entre diversas entidades. Estos 63 millones es una cantidad sensiblemente inferior a lo percibido por otras asociaciones, algunas de ellas consideradas afines al PSOE (véase EL PAÍS del pasado 19 de septiembre).Sin embargo, la subsecretaria negó cualquier discriminación de la entidad religiosa y dijo que Cruz Roja -que ha percibido más de 3.000 millones del IRPF- "es al Estado, lo que Cáritas a la Iglesia", porque, en su opinión, Cruz Roja es "una organización auxiliar de las administraciones públicas sobre la que ejerce tutela el Gobierno, que, como cualquier otro de Europa, no ha renunciado a ello". "Sonrío cuando se hacen estas acusaciones porque sé cuánto cuesta organizar una entidad; si existiera ese favoritismo sería malo para la democracia", añadió.

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