Bush y Gorbachov se reunirán la primavera próxima

El presidente de EE UU, George Bush, anunció ayer que se reunirá con el máximo líder soviético, Mijail Gorbachov, en la primavera o a comienzos del verano del año próximo, "probablemente en Washington". Bush formuló el anuncio en su residencia de vacaciones de Kennebunkport, Estado de Maine, después de telefonear al secretario de Estado norteamericano, James Baker, quien firmó, también ayer, con su homólogo soviético, Edvaird Shevardnadze, acuerdos sobre desarme con una referencia especial a las armas químicas.

Bush se manifestó "muy satisfecho" de los; acuerdos entre Estados Unidos y la URSS, alcanzado en Jackson Hole, Estado de Wyoming, después de dos días de discusiones entre Baker y Shevardnadze. El memorándum firmado por los jefes de las diplomacias norteamericana y soviética incluye un intercambio de información y la inspección de las unidades de producción y de almacenamiento de las armas químicas. El ministro soviético anunció que su país desmantelará, tal corno Washington venía exigiéndolo, la estación de radar de Krasnoyarsk.El texto sobre las armas quimicas, destinado a facilitar el logro de un tratado multilateral que prohíba totalmente la fabricación y el almacenamiento de dicho tipo, de armas, forma parte de una serie de acuerdos y proposiciones sobre desarme y sobre las relaciones bilaterales adoptados o estudiados por Baker y Shevardnadze en sus encuentros. Según fuentes de EE UU, el compromiso sobre armas quimicas prevé en un primer paso el intercambio de informaciones generales hasta finales de año, y, a partir del 30 de junio de 1990, visitas a las fábricas de estas armas designadas por el país visitado.

Asimismo, fue alcanzado un acuerdo de principio sobre verificaciones experimentales de la limitación de armas estratégicas en el marco de un futuro tratado START.

La 'guerra de las galaxias'

La Unión Soviética ha retirado también su oposición a condicionar un acuerdo sobre armas estratégicas de largo alcance al abandono por parte de Estados Unidos del programa Iniciativa de Defensa Estratégica (SDI), popularmente conocido como guerra de las galaxias. La decisión soviética hace desaparecer uno de los mayores obstáculos que han impedido hasta ahora la firma de un tratado entre las superpotencias sobre limitación de proyectiles estratégicos intercontinentales (ICBM).

Fuentes de las delegaciones soviética y norteamericana que han asistido a las reuniones entre el ministro de Exteriores Shevardnadze y Eaker, manifestaron ayer que la decisión soviética forma parte de una serie de propuestas de desarme contenidas en una carta del máximo dirigente de la URSS, Mijail Gorbachov, entregada por Shevardnadze al presidente George Bush durante una entrevista de dos horas mantenida el pasado jueves en la Casa Blanca.

La insistencia soviética en ligar el tema de la guerra de las galaxias a un posible acuerdo sobre los ICBM hizo fracasar la reunión celebrada en Reikiavik en noviembre de 1986 entre Gorbachov y el entonces presidente Ronald Reagan.

En la actualidad, la financiación del SDI es,uno de los puntos de conflicto entre el Congreso estadounidense, que quiere suprimirlo, y la Casa Blanca, que quiere mantenerlo.

Durante la reunión entre los ministros de Exteriores de las dos superpotencias, Moscú ha aceptado también la idea norteamericana de cielos abiertos, avanzada en mayo por el presidente Bush y que permitiría a los aviones de la OTAN y el Pacto de Varsovia sobrevolar el espacio contrario. Su puesta en práctica sólo será decidida tras una conferencia internacional de los países interesados.

En la carta aludida, en la que Gorbachov responde a una misiva enviada por Bush el pasado 20 de junio, el líder soviético expresa su esperanza en concluir un acuerdo entre la OTAN y el Pacto de Varsovia sobre reducción de fuerzas convencionales en Europa en la primera mitad del próximo año.