Lactaria Montañesa SAM-RAM suspende su actividad por falta de leche

Por falta de leche fresca, motivo por el cual Nestlé suspendió ayer la fabricación de productos lácteos en su planta de La Penilla (Cantabria), la otra gran industria transformadora de la región, la LactarIa Montañesa SAM-RAM, ha paralizado también su funcionamiento. Nadie, excepto el encargado de la centralita telefónica, se encontraba ayer en sus instalaciones.

Propiedad de Tabacalera, La factoría SAM-RAM, situada en Renedo de Piélagos, antes de generarse el conflicto que enfrenta a ganaderos e industrias, transformaba cada día 200.000 litros de leche fresca en pasteurizada y de larga vida.Un escape de amoníaco, de origen fortuito según demostró la inspección pericial, seguido de incendio, el 31 de agosto, había paralizado momentáneamente a principios de mes la central por la pérdida de su capacidad de refrigeración. La vuelta a la normalidad, tras repararse la avería, coincide ahora con el bloqueo por los ganaderos de la entrega de leche, lo que ha obligado a Lactaria Montañesa, (unos 100 trabajadores), a suspender por el momento sus actividades. Tras nueve días consecutivos de no llegar el producto a las empresas casi 11 millones de litros de leche fresca han quedado sin comercializar en Cantabria.

Por otra parte, los transportistas mantienen la huelga iniciada el pasado día 1 y que debía haber terminado ayer. Una asamblea anunciada para el lunes día 11 servirá para que el colectivo se pronuncie, mediante votación, sobre la prolongación del conflicto o la vuelta a las actividades. Frutas y verduras comienzan a escasear en la capital debido a la no circulación de los camiones que aseguran su abastecimiento.

En el curso de las últimas horas, según se informaba ayer, ha habido a iniciativa de los ganaderos algunos contactos telefónicos para emprender negociaciones con las empresas transformadoras de leche. Un portavoz de las empresas, sin embargo, dijo que no se producirá diálogo alguno mientras en el campo la situación no se normalice. Las industrias consideran que el tema del precio de mercado no es negociable en Santader y que debe ser sometido a otras instancias en Madrid. Otras cuestiones sí podrían negociarse en la capital cántabra, como la libertad de elegir las industrias por parte de los ganaderos.