El Camino de Santiago se hace autopista

Autocares de boy scouts franceses y de neocatecumenales holandeses, peregrinos belgas a pie y grupos de españoles en turismo. El Camino de Santiago se ha convertido desde hace semanas en una cosmopolita autopista espiritual por la que se desplazan miles de personas. La mayoría tiene como objetivo estar en Santiago el próximo sábado, día en que llega a la ciudad Juan Pablo II en su tercera visita a España, durante la que se celebrará la IV Jornada Mundial de la Juventud.

Ver al Papa. Ésa es la voluntad de más de medio centenar de boy scouts franceses, entusiastas de Juan Pablo II, según afirman. Son adolescentes y pertenecen a una organización hija de un pujante catolicismo que, según la prensa francesa, no es heredero de los movimientos históricos del cristianismo en aquel país. Viajan uniformados y llevan adheridas a las ventanas del autocar fotografías de Karol Wojtyla. Los boy scouts han hecho una parada en Burgos, ciudad en la que anteayer y ayer eran esperados unos 2.000 franceses, según los guardas que el Ayuntamiento de la capital castellana mantiene desde la mañana hasta que anochece en uno de los aparcamientos de peregrinos, el mercado de ganado de la ciudad. Burgos es un hervidero de viajeros a Santiago. Las n-úsas matinales en la catedral están repletas de peregrinos. Algunos, como un centenar de italianos, van guiados por un sacerdote y se agrupan alrededor de pancartas que sirven de punto de referencia geográfico yespiritual para sus compañeros. Los italianos viajan en autocar desde que salieron de su país, hace varios días, y aseguran que no han venido a España a hacer turismo. Quieren estar presentes en Santiago, afirman, para dar testimonio de la necesidad de una Europa que recupere sus raíces cristianas, tal como el Papa pidió hace nueve años en la ciudad compostelana. Allí son esperados más de 20.000 jóvenes franceses y otros tantos procedentes de Italia.Solidaridad en ruta

Sin embargo, la gran mayoría serán españoles, aunque su presencia en los puntos claves de la ruta se hace menos patente. Muchos se encuentran ya desde hace días en Santiago, donde han comenzado a tomar posiciones para los actos del fin de semana. Los últimos en llegar serán en su mayoría extranjeros.

El viaje desde sus países de origen es largo, pero algunos, como los italianos, aseguran haber encontrado un gran ambiente de solidaridad a lo largo de la ruta. "Una red que te sostiene", explica unajoven de Bolonia que recorre la ruta jacobea a pie desde Saint Jean Pied de Port. Cada día ha hecho una veintena de kilómetros, al igual que un belga flamenco que salióhace tres meses de Bruselas. Ellos llegarán a Santiago cuando el Papa haya dejado la ciudad, porque quienes hacen toda la ruta a pie no son peregrinos, en su mayoría, que moviliza la visita del Papa, son viajeros que hacen un peregrinaje previsto cuando menos con un año de antelación.