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Borrell presentará tres experiencias piloto para modificar la elaboración de los Presupuestos del Estado

El secretario de Estado de Hacienda, José Borrell, se mostró ayer partidario de cambiar la forma en que se presentan los Presupuestos Generales del Estado. Anunció que, como primera experiencia, este año se presentará a Las Cortes para su aprobación un presupuesto por programas en tres partidas concretas de gasto, aunque sin especificar cuáles. Reconoció, sin embargo, que un presupuesto por programas es mucho más difícil de aceptar por el Parlamento e incluso por el Consejo de Ministros.Borrell, durante una comparecencia ante la Comisión de Presupuestos del Congreso, apuntó las dificultades que existen para la comprensión de un presupuesto como el actual que no especifica partidas concretas por objetivos, sino que se presenta por secciones y por capítulos.

"A la gente", explicó, "le da igual saber lo que nos gastamos en transferencias corrientes o el presupuesto que tiene un ministerio u otro"; sin embargo, "le sería muy útil conocer el gasto que se destina a escuelas, hospitales o carreteras".

Un presupuesto como el que tenemos ahora "sólo interesa a los economistas para hacer elucubraciones esotéricas sobre la evolución de la demanda agregada o a los ministros para conocer de cuánto dinero disponen". Añadió que el "mecanismo de discusión parlamentaria de los presupuestos es obsoleto".

Afirmó también que con la actual presupuestación por secciones y capítulos, los gestores públicos tienen escasa libertad para asignar recursos según las necesidades. Apostó en este sentido, por un presupuesto menos rígido que el actual.

En sus críticas al presupuesto, Borrell apuntó que, por ejemplo, no se conoce nada sobre los sueldos de los presidentes de las empresas públicas, mientras que los de los directores generales están perfectamente controlados.

Sobre el presupuesto del año próximo, Borrell explicó en los pasillos del Congreso que los objetivos -gastos, ingresos y déficit público- no están todavía fijados. No obstante, señaló que el objetivo de déficit público cero en el año 1992 se mantiene, aunque serán necesarios ajustes hasta esa fecha. Apuntó en este sentido que el retraso con que se va a declarar el impuesto sobre la renta este año -en el mes de noviembre- va a suponer que las devoluciones se harán el próximo año, por lo que habrá una merma adicional en los ingresos.

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