Los tesoros del Prado vuelven a Ginebra 50 años después

El director del Museo del Prado y el ministro de Cultura español estuvieron de acuerdo ayer en Ginebra en considerar la exposición Del Greco a Goya como una deuda pendiente con quienes se prestaron a proteger en momentos dramáticos la parte central de lo que hoy se consideran los tesoros del Prado. Se conmemoran 50 años de la exposición Obras maestras del Museo del Prado en las mismas salas del Museo de Arte y de Historia de Ginebra que acogió estos cuadros durante la guerra civil española. Junto a esta muestra se inauguró también una retrospectiva de Antonio Saura. Son los dos puntos centrales del programa Verano español, que se desarrollará en Ginebra con conciertos y otras manifestaciones culturales en los próximos meses.

Hace 50 años las salas del Museo de Arte y de Historia de Ginebra exhibieron 200 obras que habían salido precipitadamente de España, y gran parte del Museo del Prado, en un éxodo que tuvo mucho de heroismo y de aventura. Las obras fueron evacuadas por el Ejército republicano y recibidas en Ginebra bajo la protección de la Sociedad de Naciones, que se comprometió a restituir los cuadros al Gobierno legal que existiera en España al término de la guerra. Antes del viaje de retorno se realizó una gran exposición en Ginebra que fue visitada por 400.000 personas.Las mismas salas abrieron ayer sus puertas con una muestra que conmemora este gesto, aunque no ha sido posible hacerlo con las mismas obras expuestas entonces.

Deuda

Sólo ocho de las pinturas originales han vuelto a Ginebra: tres de El Greco, tres de Velázquez, una de Murillo y una de Goya.De las otras 68 casi la mitad pertenecen al Museo del Prado y las otras a otras colecciones. Alfonso Pérez Sánchez, director del Museo del Prado, afirmó que sería imposible realizar la misma exposición porque varias de las pinturas, debido a su fragilidad no pueden ya abandonar el museo. "Estábamos en deuda con Ginebra y por eso hemos tratado de ofrecerles una exposición que a la vez de conmemorar su generoso gesto pueda ser de utilidad para ellos".

La retrospectiva que el Museo Rath presenta del pintor Antonio Saura significa entrar en contacto con los artistas españoles del presente, según aseguró el alcalde de Ginebra, René Enimenegger.

El ministro de Cultura, Jorge Semprún, afirmó durante la inauguración que le complacía mucho presentar esta exposición porque, además de los lazos de amistad que le unían al pintor Antonio Saura, se trataba de uno de los artistas que representaron la tradición de vanguardia de la pintura española durante la dictadura.

Antonio Saura se mostró a su vez, muy emocionado ante esta gran exposición que ocupa la dos plantas del museo. "Es la primera vez que España me reconocede esta manera y espero con ilusión el momento en que esta misma exposición vaya a Valencia y después a Madrid".

En relación a la política del Ministerio de Cultura con respecto a las artes plásticas, Jorge Semprún afirmó que se han cambiado las funciones del Centro Nacional de Exposiciones, que dirigió hasta su dimisión, la semana pasada, Carmen Giménez. "Ahora se transformará en un centro coordinador desde Madrid para exposiciones tanto de arte de vanguardia como otras, que podrán ser vistas en todo el territorio español y romper así con el centralismo que se veía hasta ahora", comentó Semprún.

El ministro afirmó posteriormente que se están estudiando varios proyectos para "conquistar" algún otro edificio, además del Museo del Ejército, y ampliar las posibilidades de exposición de los fondos del Prado. "Sabemos que es urgente solucionar este problema de espacio que sufre la primera pinacoteca nacional y por ello estamos buscando algún otro edificio, situado en el eje del paseo de la Castellana y el parque del Retiro, y este eje será el que constituirá el centro artístico y museístico de España".