Duarte entrega hoy el poder a Cristiani

El presidente de El Salvador, José Napoleón Duarte, entrega hoy el poder a su sucesor, Alfredo Cristiani, ante el boicoteo del Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN), que en sus últimos ataques ha dejado al país sin luz. Duarte continuará a partir de hoy en el hospital su lucha contra un cáncer terminal de hígado. Cristiani, de la derechista Alianza Republicana Nacionalista (Arena), comenzará su Gobierno acosado por una guerra civil que se ha cobrado ya 70.000 muertos. Duarte ha librado en cinco años de Gobierno tres guerras: contra los escuadrones de la muerte, contra la guerrilla del Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN) y, la última, contra un cáncer detectado hace un año. Su mayor aportación a la historia reciente salvadoreña es el traspaso de poder por primera vez de un gobierno civil a otro.

Para sus colaboradores, Duarte ha intentado encabezar una "revolución democrática". Para sus críticos, ha sido un títere de Estados Unidos en Centroamérica, que ha abandonado sus principios por aferrarse al poder.

Alfredo Cristiani, de 41 años, exportador de café, y con buena salud, asume la presidencia ante la mirada de la comunidad internacional atenta a la evolución del estado del país centroamericano. Cristiani, según observadores salvadoreños, "está entre la guerra y la paz", y asumirá la presidencia bajo presiones de líderes de su partido como Roberto DAubuisson, considerado el hombre fuerte de esa formación política y etiquetado por los observadores como de extrema derecha.

Unos 10.000 soldados salvadoreños velarán por la seguridad de los gobernantes y misiones diplomáticas internacionales que asisten hoy a la toma de posesión del presidente electo. El director de la policía, coronel Carlos Guzmán Aguilar, afirmó ayer que el plan pretende impedir el anunciado boicoteo guerrillero contra la investidura del nuevo presidente.

Un millar de soldados

Los organizadores de la ceremonia han previsto que unos 200 periodistas de medios de comunicación extranjeros cubrirán la información del traspaso de poder. Un millar de soldados custodiará la sede donde se realizará la transmisión de poderes, que se efectuará en el local de la Feria Internacional, cercana a varias instalaciones militares.El Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional ha asegurado que incrementará los ataques contra posiciones militares y que destruirá la infraestructura económica del país para forzar al nuevo Gobierno a negociar y lograr poner fin al conflicto bélico, que dura ya más de nueve años. En esta nueva ofensiva, la guerrilla exige llevar ante los tribunales a DAubuisson, un ex militar al que se vincula con los escuadrones de la muerte, petición que el desde hoy presidente ha calificado de "poco seria".

El FMLN intenta explotar las tensiones dentro de Arena, partido en el que el rostro humano de Cristiani convive con la derecha más extrema de DAubuisson, según los observadores. A la ofensiva guerrillera se suman las escaramuzas entre los miembros de Arena, que estallaron con los rumores sobre quién sería el nuevo ministro de Defensa, cargo de especial importancia en un país en guerra y que recibe de EE UU una ayuda militar de más de 400 millones de dólares. El adelanto oficioso de que el puesto sería para el general Humberto Larios provocó la ira de los duros de Arena, que prefieren al jefe de la Fuerza Aérea, general Rafael Bustillo.

En vísperas de su toma de posesión, la guerrilla ha presentado a Cristiani, a quien considera un "moderado", una nueva oferta de diálogo, pero dirigentes de Arena la rechazaron de plano. Sin embargo, ni la mayoría de ARENA en la Asamblea, ni el acceso de Cristiani a la presidencia, parecen haber cerrado definitivamente las puertas a una perspectiva de diálogo. Desde octubre de 1984 hasta el pasado mes de febrero, gobierno y guerrilla se han reunido, infructuosamente, en cinco ocasiones.