Situación en Honduras
En la edición de EL PAÍS del 4 de septiembre aparece en la sección turística el artículo El plomo flota y el corcho se hunde, de Javier Martínez Reverte, que a todo connacional que lo lea le ha de causar desagrado debido a los conceptos peyorativos y la mala intención con que fue escrito, además del daño ofensivo que se hace a nuestro país.De un tiempo acá, una serie de reportajes escritos, documentales de televisión y artículos han aparecido mostrando imágenes distorsionadas sobre varios países latinoamericanos, en donde lo despectivo, a veces con manchas de sadismo, se nos configura enfatizando lo negativo con pérdida de la objetividad. Si bien es cierto que tenemos tejados de vidrio, los latinoamericanos no hemos inventado la corrupción institucional, la delincuencia, el tráfico de drogas, la prostitución, ni hemos originado el SIDA. La OMS señala que tenemos 109 casos de SIDA en Honduras. Se nos quiere acusar de haber cometido el pecado de solicitar ayuda militar a Estados Unidos, lo que ha permitido que nuestro modesto presupuesto no se despilfarre en armamentismo frente a las amenazas vecinas. Pero lo asombroso es que de ahí se deduzca el origen del SIDA en Honduras. Más asombroso sería demostrar cómo existiendo en Europa 360.000 soldados norteamericanos, los europeos hayan podido evitar la propagación del SIDA cuando a circunstancias mayores las causas de la simbiosis y las teorías debieran ser las mismas en mayor proporción.
A menudo se pretende descubrir en nuestros países la pobreza, el atraso y tantos aspectos que también existen en muchas partes del mundo. Hemos sido pobres antes del descubrimiento de América, porque nuestros aborígenes ni siquiera sabían el valor del oro y los metales. Después de la independencia y en la actualidad seguimos siendo pobres por el control internacional de precios que se nos ha impuesto de los países industrializados, pobreza en aumento con una deuda externa agobiante. Pero todo ello no será impedimento para que nuestros países sigan creciendo hacia el futuro.-
Embajador de Honduras. Madrid.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.
Archivado En
- Condonación deuda
- Tercer mundo
- Opinión
- Estructura económica
- Deuda externa
- Honduras
- Finanzas internacionales
- Pobreza
- Centroamérica
- Comercio internacional
- Geopolítica
- Relaciones económicas
- VIH SIDA
- ETS
- Enfermedades infecciosas
- Comercio
- Defensa
- Enfermedades
- Medicina
- América
- Economía
- Política
- Finanzas
- Problemas sociales
- Relaciones exteriores