El aire de Venecia se hace irrespirable al pudrirse las algas
La invasión de las algas en Venecia se agrava al pudrirse más de un millón de toneladas depositadas en el fondo de la laguna. Producen un olor fortísimo a huevos podridos, disminuyen el oxígeno y pueden causar daños a la salud.El olor fétido que en un principio se advertía sólo en algunas zonas y sobre todo en las islas más pequeñas, ahora ha invadido toda la ciudad desde Santa Marta a Castello. Ya han comenzado a aparecer notando sobre el agua bancos de peces muertos. Las autoridades sanitarias han lanzado una llamada pídiendo que nadie los coma, aunque en realidad se mueren más por falta de oxígeno que por envenena miento.
El aire de Venecia al llenarse de ácido sulfidrico, se hace difícilmente respirable. La gente se asusta, llama a los hospitales quejándose de náuseas, mal de estómago, dolor de cabeza e irritación de garganta. Las autoridades, como ya habían explicado a este corresponsal días atrás, intentan convencer a la gente de que la situación aún no es grave para la salud y que por el momento el índice de gravedad alcanza el punto diez, mientras que para llegar a la emergencia tendría que subir a cien.
La recogida de las algas putrefactas se puede hacer sólo con ciertas maquinas especializadas que resultan insuficientes, aunque están trabajando ahora día y noche sin parar. La situación se ha complicado porque sobre la preciosa ciudad de Marco Polo ha caído una temperatura de fuego de casi 40 grados a la sombra con un calor húmedo y sin una chispa de viento, lo cual aumenta el mal olor y hace que el aire se sienta como irrespirable.
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