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España exigirá en breve el visado a ciudadanos de Marruecos, siguiendo la decisión de la CE

La implantación por España de visados a los ciudadanos de Marruecos será decidida por la Comunidad Europea en un breve plazo de tiempo, según han informado fuentes españolas. Ceuta y Melilla quedarán exentas de esta decisión y permanecerán en un denominado régimen de frontalía. España informó recientemente a Marruecos de la política comunitaria en esta materia y de la próxima implantación de visados por la CE a Marruecos, Argelia y Túnez. La próxima decisión de la CE pretende restringir la emigración clandestina por razones económicas.

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El director general de Asuntos Consulares del Ministerio de Asuntos Exteriores, Rafael Pastor Ridruejo, afirma que, por las investigaciones de su departamento, se calcula que tendrán que ser tramitados cerca de 80.000 visados al año sólo de marroquíes con destino a España y no al resto de Europa.Pastor precisa que los marroquíes con residencia en países de la Comunidad no necesitarán visado, lo cual reducirá notablemente el volumen de trataciones. Sin embargo, el director general de Asuntos Consulares añade que se estima que los marroquíes que cruzan la Península al año y en los dos sentidos superan el millón de personas.

El problema de Ceuta y Melilla, calificado en fuentes oficiales como "muy delicado", se resolverá en un principio siguiendo un denominado régimen de frontalía. No se exigirá visado a los marroquíes que se trasladen a las dos ciudades españolas, y el control se establecerá en la Península.

Las autoridades españolas habían estimado, siguiendo las previsiones de la Comunidad Europea, que la implantación de visados se iniciaría a partir de marzo, pero las negociaciones en el seno de la CE han retrasado esas primeras previsiones.

Rafael Pastor participó la semana pasada en una reunión en Colonia (RFA) con el resto de los responsables de la CE sobre estas materias, y defendió la postura española. Esta posición consiste en que la implantación de visados a esos países magrebíes se tome de forma unánime por todos los miembros de la comunidad.

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Cuatro países de los doce, entre ellos Italia, no exigen aún tal medida, y España pretende que esta decisión se tome por unanimidad, dada la delicada situación que le supone implantar estas medidas a vecinos con los que existen excelentes relaciones diplomáticas, según fuentes españolas.

Infraestructura

De acuerdo con dichas fuentes, la implantación de visados a Marruecos, Túnez y Argelia será tomada en una de las próximas reuniones de la CE sobre estas materias.

España ya está preparando la infraestructura necesaria, tanto material como humana, en sus consulados de estos países mediterráneos para abordar tales trámites, que serán especialmente voluminosos en Marruecos por el número de ciudadanos maroquíes que se trasladan a España o la cruzan para entrar en otros lugares de la Comunidad.

Rafael Pastor informó a las autoridades marroquíes de la política comunitaria en materia de visados, y transmitió en Rabat que España implantará tal medida siguiendo las decisiones comunitarias. Esta medida no ha sido muy bien recibida por las autoridades de Rabat, según fuentes diplomáticas españolas.

El director general de Asuntos Consulares precisa que la política de visados pretende no restringir pero sí controlar la entrada y el tránsito de ciudadanos. Las autoridades españolas han conseguido que los ciudadanos marroquíes con residencia en un país de la comunidad queden exentos de visado y puedan cruzar España sin necesidad de ese trámite. Esto facilitará enormemente la labor de los consulados españoles en Marruecos.

Una de las objetivos prioritarios de la medida que adoptará la CE consiste en evitar la emigración clandestina de carácter económico. Ciudadanos marroquíes y de otros países de África salen de sus lugares de origen y se trasladan a Europa en busca de trabajo y mejores condiciones de vida.

La CE, según fuentes españolas, pretende controlar estas avalanchas de emigrantes y está presionando para que se exijan visados también a ciudadanos de Turquía y Yugoslavia que son considerados conflictivos al salir de sus fronteras en busca de mejores condiciones de vida.

El embajador español en Rabat, Joaquín Ortega, reconoció que estaba prevista en un principio la implantación de visados para el 1 de marzo, pero tal decisión ha sido atrasada. El embajador explicó que será muy importante el volumen de visados para tramitar.

Joaquín Ortega precisó que los consulados en Marruecos están preparándose para el inicio de tal medida, pues necesitarán una infraestructura humana, material y económica muy importante.

El embajador marroquí en Madrid, Azedine Guessous, estaba ayer ilocalizable.

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