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Shevardnadze dice en Bonn que la historia decidirá sobre la unidad alemana

El ministro soviético de Asuntos Exteriores, Edvard Shevardnadze hizo ayer en Bonn una clara alusión a la unidad alemana, sin descartarla, al manifestar que "cuestiones que hoy no pueden ser objeto de la política práctica deben ser decididas en el futuro por la historia". La URSS ofreció asimismo dar prioridad en el desarme a la eliminación de los misiles de corto alcance, opción que cuenta en la RFA con grandes simpatías y un fuerte rechazo por parte de otros países de la Alianza Atlántica; entre ellos, Estados Unidos. El jefe de la diplomacia soviética llega hoy a España.

El ministro soviético solicitó asimismo la eliminación de la lista Cocom de productos embargados por Occidente a los países socialistas. En un encuentro con representantes de la industria alemana, declaró que "esta condenada lista" ha frustrado muchos intentos de cooperación entre ambos estados. El ministro federal alemán de Asuntos Exteriores, Hans Dietrich Genscher y la asociación alemana de la industria y el comercio (DIHT) se manifestaron a favor (le reducir el índice de productos embargados por consideraciones estratégico-militares.La frase alusiva a la historia como última instancia que decidirá sobre el orden territorial en Alemania, pronunciada por el ministro soviético en su brindis durante la cena que le ofreció Genscher, fue la nota mas destacada de la primera jornada de la visita (le Shevardnadze a Bonn, dominada por un tono claramente conciliador y optimista por ambas partes.

Shevardnadze añadió que la historia "no ha jurado lealtad a ninguna constitución" en referencia a la ley fundamental de la República Federal de Alemania que califica de objetivo primordial del Estado la reunificación alemana. La primera visita de un ministro soviético de Asuntos Exteriores a la RFA desde el despliegue de los euromisiles en 1983 está demostrando que las autoridades soviéticas han decidido cambiar radicalmente su política hacia el Estado alemán occidental.Cinco años de marginación

Tras más de cinco años en los que Moscú marginó a Bonn en su política internacional, Shevardnandze llamó ayer en Bonn a "un cambio en la concepción de las relaciones entre nuestros estados", lo que tendría "decididamente una importancia histórica". El ministro elogió "la aportación activa y oportuna" de la RFA en la consecución del primer acuerdo de desarme de la historia" y manifestó que en las "primeras etapas debemos trabajar para que desaparezcan de los arsenales las armas nucleares que son utilizables de forma geográficamente selectiva". Shevardnadze se hizo así eco de la preocupación de amplios sectores alemanes, incluidos los conservadores, ante la singularización que supone para los dos Estados alemanes el riesgo de una guerra nuclear limitada al suelo alemán. El jefe del estado de la República Democrática Alemana, Erich Honecker, había hecho una propuesta en este mismo sentido al canciller Helmut Kohl en una carta a principios de año.

Shevardnadze propuso ayer comenzar la liquidación de las armas nucleares tácticas, de alcance inferior a los 500 kilómetros, incluyendo en las próximas negociaciones sobre armamento convencional las piezas artilleras de doble uso: nuclear y convencional.

Shevardnadze se entrevistó ayer con el presidente de la República, Richard Von Weizsaecker quien, con su reciente viaje a Moscú, abrió el camino a lo que Genscher ha calificado como "nueva página en la historia de las relaciones entre la URSS y la RFA". Este cambio cualitativo en los contactos será ratificado en la visita de Mijaíl Gorbachov a Bonn que las autoridades federales alemanas quieren que se celebre aún en el primer semestre de este año, mientras la RFA ocupe la presidencia de la Comunidad Europea.

Shevardnadze insisitió en el interés de la URSS en estrechar y potenciar al máximo los contactos económicos con la RFA. "Las relaciones económicas tienen ahora la prioridad", dijo.

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