La OTAN apoya una reducción del 50%de los arsenales nucleares estratégicos

Los ministros de Defensa de la OTAN, reunidos estos tres días pasados en Monterey (California) en una nueva sesión del Grupo de Planes Nucleares (NPG), decidieron apoyar una reducción del 50% de los arsenales nucleares estratégicos (misiles intercontinentales) e hicieron constar su "bienvenida y respaldo total" al previsto acuerdo de EE UU y la URSS sobre eliminación de misiles de corto y medio alcance.

Así quedó establecido en el comunicado final de la reunión hecho público a mediodía de ayer (última hora de la noche en España). No obstante, el mismo comunicado precisa que la doctrina de la respuesta flexible "continuará siendo vital para la seguridad de la Alianza".El comunicado agrega que, frente a la todavía vigente amenaza del Pacto de Varsovia, sigue siendo necesario el mantenimiento de armas nucleares en Europa, pero que la política de la OTAN consiste en poseer "sólo el número indispensable de armas nucleares para una disuasión creíble". Añade que, mientras la URSS ha incrementado en los últimos años sus arsenales nucIeares, la OTAN ha efectuado una reducción unilateral que ha supuesto que el número de armas atómicas sea hoy el menor registrado en los últimos 20 años en Occidente.

En una conferencia de prensa celebrada ayer al término de la reunión del NPG, el secretario de Defensa de Estados Unidos, Caspar Weinberger, señaló que la OTAN "seguirá necesitando un potencial eficaz y equilibrado de fuerzas nucleares y convencionales". Se refería así Weinberger al sentimiento generalizado entre los asistentes a la reunión de Monterey de que será necesario modernizar los misiles de más corto alcance (menos de 500 kilómetros) no afectados por el acuerdo de desarme del próximo 7 de diciembre y potenciar las fuejizas convencionales de la OTAN, si bien las fórmulas concretas para hacerlo no se analizarán hasta la próxima reunión del NPG, a celebrar en abril próximo en Dinamarca.

Respaldo unánime

Tanto Weinberger como el secretario general de la OTAN, lord Peter Carrington, coincidieron en calificar de "unánime" el apoyo de los aliados al acuerdo sobre eliminación de misiles de alcance intermedio. "Los europeos están absolutamente satisfechos", dijo Carrington, quien habló de "hecho histórico" al referirse a dicho tratado. Weinberger destacó que el acuerdo de desarme con la URSS sólo ha sido posible gracias a la doble decisión adoptada por la OTAN en 1979, consistente en desplegar los euromisiles si la URSS no retiraba sus misiles SS-20 de alcance intermedio.En el comunicado del NPG, también se indica que los aliados desean un pronto acuerdo sobre verificación del tratado de desarme. El ministro de Defensa británico, G. Younger, afirmó que aceptaría la presencia de soviéticos en las bases inglesas para verificar el cumplimiento del acuerdo entre la URSS y EE UU.

En Monterey, los aliados también se han mostrado favorables, a que el Senado norteamericano ratifique cuanto antes el acuerdo y a que, junto al inicio de nuevas fórmulas de desarme, sean eliminadas por ambas partes las armas químicas.

Para el ministro español de Defensa, Narcís Serra, "ahora hay que hacer hincapié en el armamento convencional", ya que existe "unanimidad total" entre los aliados de que la URSS tiene una fuerte ventaja en este campo, que será más evidente tras el desarme nuclear. "La noción de equilibrio es consustancial a la de seguridad", comentó Serra, y recordó que uno de los apartados del comunicado suscrito ayer dice: "Los objetivos fundamentales de la seguridad de la Alianza son disuadir de una agresión y fomentar un clima favorable a la paz y a las relaciones estables entre el Este y el Oeste, sobre la base de unas fuerzas equilibradas al nivel más bajo posible. El mantenimiento de fuerzas militares eficaces y la búsqueda del control de armas son los elementos complementarios de esa política de seguridad".