Una ocasión histórica

La reunión de ministros de Exteriores del Pacto de Varsovia celebrada hace unos días en Praga mostró caminos para crear un sistema global de paz y seguridad internacional, dice el autor del artículo. Para éste, es preciso eliminar la amenaza de las armas nucleares y convencionales y asegurar las dimensiones del proceso en los ámbitos económico, político, militar, ecológico y humanitario.

La capital de la República Socialista de Checoslovaquia se convirtió el 28 y 29 de noviembre en sede de un importante acontecimiento, con la celebración de una consulta del Comité de Ministros de Relaciones Exteriores de los Estados del Tratado de Varsovia.La trascendencia de la reunión, que llamó la atención a escala mundial, se acentuó en primer término por el momento de su celebración, la profundidad del análisis de las relaciones internacionales de la actualidad y, en particular, por las respuestas que dio a las cuestiones acuciantes de hoy.

El foro aprobó dos documentos: el comunicado con los enfoques comunes de los Estados del Tratado de Varsovia respecto a los problemas principales de la vida internacional y el documento Sobre la elevación de la eficacia de la conferencia sobre el desarme en Ginebra. Ambos expresan las orientaciones principales de política exterior de países hermanos para el próximo período.

El significado de la reunión se multiplicó con el hecho de que se efectuaba en el tiempo en que el diálogo soviético-estadounidense entró en una nueva fase importante. En el tiempo en que se trataban perspectivas reales de concertar el acuerdo soviético-estadounidense sobre la liquidación de fuerzas nucleares intermedias (INF).

La reunión saludó que el encuentro de ministros de Relaciones Exteriores de la Unión Soviética y Estados Unidos en Moscú fue útil y productivo, que se superaron algunos obstáculos serios que surgían en Ginebra y que se formuló definitivamente el reglamento del futuro acuerdo referente, entre otros, a los misiles Pershing-1A. El anuncio de la cumbre Gorbachov-Reagan a partir del 7 de diciembre, en Washington, para firmar el tratado de la eliminación de los misiles de alcance intermedio de Europa tendrá una importancia histórica para el desarme.

Los ministros del Tratado de Varsovia expresaron su pleno apoyo a las propuestas soviéticas para la eliminación de los misiles de alcance intermedio, respaldaron las iniciativas soviéticas respecto a la reducción de las armas ofensivas estratégicas, así como la posición de la URSS en lo concerniente a evitar la militarización del cosmos.

Según el comunicado aprobado en la reunión, la agenda incluyó el examen profundo y multifacético de la situación actual en el mundo y el análisis de las tareas urgentes de la lucha por la paz. En lo pertinente a la situación en Europa y en el mundo tiene gran peso la constatación de que es compleja y contradictoria.

La vía del diálogo

Por una parte, no faltan señales prometedoras; por la otra persisten tendencias que despiertan preocupaciones. Se trata, en primer lugar, de la continua carrera armamentista, que debe cesar si se pretende mejorar el clima internacional.Es necesario solucionar los litigios mediante el diálogo y desarrollo de la cooperación entre países con diferente régimen social; la reunión llegó a la conclusión de que, pese a la compleja y contradictoria situación mundial, el viraje hacia una mejoría es factible.

El foro mostró caminos concretos y reales para lograr este objetivo, que consiste en crear un sistema global de paz y seguridad internacional. Ésta es la única vía auténtica para asegurar la paz y evitar el peligro de un conflicto en el mundo de hoy, lleno de riesgos. Asimismo es indispensable eliminar la amenaza que representan las armas nucleares y otros medios de destrucción en masa y cesar el peligroso armamentismo también en otras esferas.

El sistema global de paz y seguridad internacional es necesario asegurarlo en la dimensión política, militar,económica, ecológica y humanitaria, puesto que sólo así será completo y verdaderamente eficaz. Especialmente al respecto, la sesión praguense del Comité de Ministros de Relaciones Exteriores subrayó la importancia de los derechos humanos y apoyó la proposición de la Unión Soviética de realizar la conferencia europea sobre estas cuestiones en Moscú.

El Comité de Ministros de Exteriores acentuó la importancia del progreso decisivo en la esfera de las armas químicas, apreció las proposiciones de los países socialistas -entre ellos de Checoslovaquia- a la creación de las zonas sin armas nucleares y químicas y otras iniciativas regionales.

También acentuó que para mejorar la atmósfera internacional sería importante el diálogo sobre las doctrinas militares del Tratado de Varsovia y la OTAN.

Un sentido profundo que el Comité de Ministros de Relaciones Exteriores del Tratado de Varsovia aprobó fue un documento especial proponiendo la intensificación y la mayor eficacia del trabajo de la conferencia sobre el desarme en Ginebra. Este importante foro internacional podría desempeñar un papel más activo y significativo en la mejoría de las relaciones internacionales y la reducción del armamentismo. Es necesario y es posible llevar a cabo los preparativos del convenio internacional prohibiendo las armas químicas, es necesario dar pasos urgentes para el cese de la carrera armamentista.

La proposición de la sesión del Comité de Ministros de Relaciones Exteriores muestra el procedimiento que sería necesario seguir. La conferencia sobre el desarme debería trabajar con pausas cortas durante todo el año; debería apoyarse en los especialistas y científicos que podrían contribuir a la solución con éxito de las cuestiones discutidas. También la participación de los ministros de Relaciones Exteriores respaldaría los resultados de las negociaciones de la conferencia.

En la tercera sesión extraordinaria de la Asamblea General de la ONU sobre el desarme sería necesario examinar todos los aspectos de la actividad de la conferencia de Ginebra con el objetivo de hacer más reales sus resultados.

Al recibir a los cancilleres de los siete países miembros del tratado, el presidente de la República y secretario general del Partido Comunista de Checoslovaquia, Gustav Husak, agregó que el comunicado y llamamiento a favor de una mayor eficiencia de la conferencia de desarme de Ginebra parten de las conclusiones del comité consultivo político de Berlín, celebrado en mayo pasado. Destacó la importancia extraordinaria del diálogo entre la URSS y EE UU para lograr la firma de un acuerdo de importancia histórica: la liquidación de mísiles de alcance intermedio como el comienzo del proceso de liquidación total de la amenaza nuclear en el mundo.

El esfuerzo soviético

Agregó que Checoslovaquia apoya sin reservas el esfuerzo de la Unión Soviética por seguir desarrollando el diálogo y las nuevas propuestas soviéticas orientadas a la firma de acuerdos sobre las armas ofensivas estratégicas y la prevención del estacionamiento de armas en el espacio cósmico. Dijo también que estamos convencidos de que el establecimiento de zonas sin armas nucleares y químicas en los Balcanes y Europa Central y del Norte contribuiría al saneamiento de la situación en el continente y a una prohibición mundial de todas las clases de armas de destrucción en masa.La reunión de Praga fue un paso importante hacia la realización de la línea de la política exterior de la comunidad de los países del Tratado de Varsovia. Es una expresión de su esfuerzo común por avanzar notablemente en el campo de la distensión internacional, en la solución de la tarea más importante de hoy: la liquidación del peligro del conflicto bélico.