El libro tiene un plan

El objetivo del proyecto es recuperar el mercado exterior, potenciar el interior y conseguir que la producción y comercialización del libro se abra a las nuevas tecnologías, al tiempo que posibilitar aquellos proyectos que resulten más innovadores, incluido el descubrimiento de nuevos autores y mercados. Siempre sin perder de vista que la edición es una industria, pero también es algo más. En el tiempo, el plan se presenta con carácter cuatrienal y debe realizarse en su totalidad antes de 1992, lo que significa que debe estar en marcha, a lo mas tardar, el próximo año. si bien algunos puntos específicos, como la reforma del ISBN, han sido ya emprendidos.El borrador considera que hay lagunas que deben ser cubiertas urgentemente; entre otras, la de prestigiar las marcas españolas; apoyar el descubrimiento de nuevos creadores; reducir costes de producción, gestión y también los precios de venta, y mejorar la calidad de los servicios.

Una medida a tomar sería la posibilidad de dotar a las empresas para que facilitaran cursos de formación a sus empleados, si bien reconociendo la inexistencia de entidades adecuadas en el interior.

Las ayudas principales deben dirigirse a facilitar la informatización y renovación tecnológica, a la edición de primeras obras, a apoyar coediciones con otros países -en especial cuando el proyecto es español-, apoyo a revistas y acciones que promuevan la derrianda interior y la exportación, y sugiere la creación de nuevas librerías y la renovacíón de las existentes, ya que afirma que "la estructura librera de nuestro país atraviesa tina crisis profunda".

Las medidas legales imprescindibles para que todo esto sea posible están también contempladas en el borrador: desarrollo de la ley intelectual , la regulación del precio fijo y de las ventas de saldo, el desarme arancelario para las importaciones de papel de edición y la modificación a la baja del IVA, así como la elaboración de un convenio con el Banco de Crédito Industrial.