Marruecos confirma el compromiso con Bruselas para que los barcos españoles puedan pescar en sus aguas

Marruecos aceptó anoche, con 10 horas de retraso sobre lo previsto, el compromiso provisional propuesto por la Comunidad Europea (CE) para que la flota española siga faenando en sus aguas, hasta la conclusión, en diciembre próximo, de un acuerdo definitivo. Pero hasta que en Bruselas se recibió la aceptación de Rabat el pacto entre caballeros alcanzado la víspera por el comisario europeo de Pesca, Antonio Cardoso e Cunha y el ministro marroquí de Asuntos Exteriores, Abdelatif Filali, se cumplió escrupulosamente; los 700 barcos españoles no quedaron amarrados por falta de acuerdo.

La respuesta del Gobierno alauita sólo llegó a la sede de la Comision Europea a las 23 horas, porque Filali solicitó a Cardoso e Cunha una ampliación del plazo para primero poder poner a punto algunas modificaciones lingüísticas del texto que acababa de serle remitido y obtener algunas aclaraciones sobre párrafos no relacionados con el esfuerzo pesquero. "Son cambios de redacción que no afectan al contenido", comentó a madianoche Javier Elorza, encargado de negocios de la Representación de España.Filali aprovechó también la tarde para acudir a Palacio, donde sometió el texto del compromiso al rey Hassan II que, según fuentes comunitarias, dió el último visto bueno al acuerdo preliminar. La ampliación del plazo pareció a los comunitarios razonable, porque la propuesta de compromiso, aprobada verbalmente por Filali por teléfono, había sido puesta por escrito de prisa y corriendo, ya de madrugada, para poder ser enviada cuanto antes a Rabat tras ser adoptada después de medianoche por el llamado grupo exterior de pesca que integran los representantes de los doce.

Firma pendiente

Ahora queda sólo pendiente la firma por ambas partes del acuerdo transitorio, para la que no será necesario que Cardoso e Cunha y Filali se reunan fisicamente; bastará con que intercambien a través de la valija diplomática los textos con sus respectivas rúbricas.

Termina así un episodio movido de la primera negociación entre Rabat y el órgano ejecutivo europeo, al que el Gobierno español ha cedido gran parte de sus competencias pesqueras al ingresar en la CE, incluída la facultad de concluir acuerdos internacionales.

El que quedó sellado ayer tiene sólo un carácter provisional por cinco meses, durante los cuales deberá ser negociado otro de mayor duración (entre tres y cuatro años), que sustituirá al que Rabat y Madrid firmaron hace cinco anos y que venció justamente en la noche del viernes al sábado. "La negociación para el definitivo podrá continuar sin perturbaciones ( ... ) y en un clima de mútua confianza", comentó Cardoso e Cunha, visiblemente satisfecho.

El acuerdo preliminar recoge a grandes rasgos las medidas transitorias aprobadas el martes pasado por los embajadores de los doce ante la CE y sometidas a Marruecos, que intentó primero prorrogar a nivel bilateral su anterior tratado con España como si no fuese un Estado miembro de la Comunidad.

El rechazo de esta iniciativa marroquí por el Ejecutivo europeo incitó, sin embargo; a Filali a dar su aceptación de principio a las medidas transitorias que le habían sido propuestas, aunque consiguió que en lugar de tres meses y medio su duración fuese de cinco.

A parte de este cambio, las mencionadas medidas mantienen el actual statu quo, con el mismo número de licencias, toneladas de registro bruto, mallas y capturas. Pero los pagos del Estado español al reino alauita correran ahora a cargo de la CE, que le abonará de aquí a finales del presente año 1.633 millones de pesetas, incluído el 40% del canon y las becas para que un centenar de estudiantes marroquíes cursen sus estudios en España.

A pesar del moderado optimismo de Cardoso, la negociación del acuerdo definitivo no parece fácil. Ayer la parte marroquí dejó sentado que el compromiso vio prejuzga el porvenir, para el que desea obtener, entre otras cosas, la cuadruplicación de las ayudas propuestas por la CE, hasta alcanzar los 15.000 millones de pesetas anuales, así como una reducción de capturas de más del 40%. Pero la experiencia de los últimos días de julio puede hacer comprender a Rabat, estimaban algunas fuentes diplomáticas, que con Ha pesada administración comunitaria no es una buena táctica intentar arrancarle concesiones dejando todo para el último momento.