El optimismo de los ministros de Exteriores contrasta con el comunicado oficial soviético
El optimismo de que hicieron gala ayer en Moscú, al término de sus reuniones, los jefes de las diplomacias de Estados Unidos y de la URSS, George Shultz y Edvard Shevardnadze, respectivamente, contrasta con la realista frialdad del comunicado difundido la noche anterior por la agencia oficial soviética Tass sobre las ofertas presentadas por Mijail Gorbachov al secretario de Estado norteamericano.
Gorbachov propuso adoptar un compromiso unilateral para eliminar totalmente los cohetes de más corto alcance en el plazo de un año. Este compromiso estaría incluido en el acuerdo sobre los misiles de alcance intermedio, o euromisiles. Gorbachov se mostró dispuesto, además, a liquidar totalmente los misiles tácticos de combate, es decir, los misiles que tienen menos de 500 kilómetros de alcance.Los misiles de alcance medio situados en territorio europeo, SS-20, por parte soviética, y Pershing-2 y misiles de crucero por parte norteamericana, son las armas para las que existen actualmente mayores perspectivas de acuerdo en torno a la propuesta denominada opción cero, que prevé su total eliminación del continente, dejando 100 cabezas nucleares en la parte asiática de la URSS y otras tantas en Estados Unidos.
Gorbachov se opuso ante Shultz a la idea de compensar niveles en potencial nuclear de rango inferior, con el argumento de que no resulta lógico que Occidente aumente sus misiles de más corto alcance en tanto que la URSS procede a eliminar sus proyectiles de este tipo. La OTAN argumenta que la URSS tiene una ventaja numérica en cohetes de más corto alcance. De las explicaciones de Shultz quedó claro, según Tass, que la Administración norteamericana y sus aliados "no están dispuestos a descender hasta cero en la cuestión de los cohetes operativo-tácticos" y que "no tienen una posición definitiva sobre este tema".
'Directrices claves'
La firma de un tratado sobre euromisiles, con todo, no es suficiente motivo para celebrar una cumbre soviético-norteamericana, según se desprende de las afirmaciones de Gorbachov, que ha condicionado su encuentro con el presidente de EE UU a la elaboración de unas directrices claves que incluyen la Iniciativa de Defensa Estratégica (SDI).
En su encuentro con Shultz, Gorbachov precisó la postura soviética en relación a la SDI de forma más concreta que en el pasado. Explicó que la URSS entiende por "experimentos en el laboratorio" la parte de la SDI que Moscú está dispuesta a aceptar. "Teniendo en cuenta que la Administración norteamericana está vinculada a la SDI", dijo, "estamos dispuestos a buscar una salida también aquí. Estamos de acuerdo en las investigaciones en el campo de la SDI, pero limitadas al marco del laboratorio". Por tales se entienden los "trabajos técnico científicos realizados en tierra: en los institutos, en los polígonos y en las fábricas".
Gorbachov, que se entrevistó con Shultz durante cuatro horas, propuso reuniones de especialistas de los dos países para llegar a un acuerdo sobre "la lista de instalaciones que se prohíbe llevar al cosmos en el curso de estos experimentos".
El líder soviético advirtió que su país nunca reconocerá como natural "el traslado de la carrera de armamentos al cosmos", pero aseguró que Moscú busca una "solución de compromiso" y hace, "por así decirlo, los últimos esfuerzos" en el tema de la SDI. Gorbachov reiteró que si Estados Unidos instala la SDI no habrá "ningún acuerdo" sobre las armas estratégicas ofensivas, donde ambas partes llegaron en Reikiavik a un acuerdo condicional que establecía un recorte del 50%.
Sobre las pruebas nucleares, cuya prohibición total preconiza Gorbachov, el dirigente se mostró dispuesto a conversar para la elaboración de una fórmula de acuerdo que disminuya "su número y potencia".
En las directrices claves, cuya firma sería objeto de una cumbre, Gorbachov incluyó la SDI, las armas estratégicas y las pruebas nucleares.
"Para llegar a un acuerdo sobre estas directrices claves, cuya firma sería un acuerdo sobre cohetes de alcance intermedio, estoy dispuesto a encontrarme con el presidente de EE UU", dijo Gorbachov.
El comunicado de la agencia Tass sobre el encuentro entre Gorbachov y Shultz contiene elementos que invitan a pensar que la URSS está ya haciendo proyectos con vistas al sucesor de Ronald Reagan.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.
Sobre la firma
Archivado En
- Espacio aéreo
- Mijail Gorbachov
- ISD
- Declaraciones prensa
- George Shultz
- Guerra fría
- Escudo antimisiles
- Política defensa
- Seguridad aérea
- URSS
- Misiles
- Ejército aire
- Bloques políticos
- Tratados desarme
- Fuerzas armadas
- Armas nucleares
- Bloques internacionales
- Estados Unidos
- Partidos políticos
- Armamento
- Conflictos políticos
- Política exterior
- Defensa
- Historia contemporánea
- Gente