Un agente citado por Hasenfus reconoce su participación en las operaciones de abastecimiento a la 'contra'
El cubano-norteamericano Félix Rodríguez, mencionado como uno de los agentes que preparó la operación de envío de armas a la contra nicaragüense que culminó con la detención de Eugene Hasenfus, admitió el viernes, en una cadena hispana de televisión de Miami, haber participado en esas actividades.Rodríguez, también conocido como Max Valdés, fue descrito por Hasenfus como su principal contacto en El Salvador para coordinar la ayuda clandestina a los rebeldes antisandinistas. Hasenfus, capturado en Nicaragua después de que tropas sandinistas derribaran el avión en el que se llevaba la ayuda (operación en la que murieron los otros tres tripulantes), fue juzgado en Managua, condenado a 30 años de prisión y finalmente indultado.
"A finales de 1985 estuve marginalmente involucrado con un grupo que apoyaba a los combatientes de la libertad nicaragüenses", dijo el agente, un ex combatiente de la guerra de Vietnam.
"Mi principal papel en la operación fue seleccionar al personal que trabajaría directamente en la red de abastecimiento", afirmó. Rodríguez reconoció también haberse entrevistado tres veces con el vicepresidente George Bush entre enero de 1985 y mayo de 1986, aunque aclaró que en ninguna de esas tres ocasiones se trató el tema de las operaciones de aprovisionamiento de la contra. Rodríguez negó haber discutido estas actividades con Donald Gregg, consejero militar de, Bush, o con cualquier otro ayudante del vicepresidente antes de agosto de 1986, "como se ha afirmado en la cronología proporcionada por la oficina del vicepresidente".
En su aparición televisada, acompañado por su abogado, Rodríguez aclaró que había decidido "romper el código profesional de silencio" porque está " profundamente preocupado con las incorrectas y repetidas afirmaciones de los medios de comunicación que siembran la duda acerca de si el vicepresidente y sus asesores conocían estas actividades".
Según fuentes cercanas a Rodríguez, éste habló debido a que sus actividades encubiertas han terminado a consecuencia de la publicidad que le ha rodeado desde el inicio del caso Hasenfus.
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