_
_
_
_
Crítica:DANZA
Crítica
Género de opinión que describe, elogia o censura, en todo o en parte, una obra cultural o de entretenimiento. Siempre debe escribirla un experto en la materia

Caminos de un romano

En Italia no acaba de cuajar un movimiento de danza contemporánea. Los especialistas de aquel país (Pasi, Bentivoglio, Tossi) han teorizado sobre esto hasta el cansancio. El asunto es que, a pesar de dar figuras importantes y tener una tradición en ballet que ha jugado un papel fundamental desde Cecchetti hasta Vittorio Biaggi, la dispersión se ha impuesto y las corrientes de vanguardia no han sentido tina implantación orgánica, como en Francia. No se trata de comparar el tratamiento dado a la danza en ambos países, pero sí un ejemplo de cómo en Italia ha faltado una sistemática, y una ayuda de la estructura cultural que permitiera un desarrollo que pasa, necesariamente, por el experimento continuado.Enzo Cosimi es un inquieto joven de 28 años que ha vuelto a Italia luego de tener la experiencia norteamericana. El salto continental deja un vacío, donde se perciben secuelas de minimal donde no hay intención minirnalista, rasgos de arte povera, sin que los principios de esta corriente sean manifiestos, así como fragmentos conceptuales que se quedan deshilvanados de una trama central plagada de inmovilismo, otro fenómeno que ha hecho estragos en la danza de hoy.

Muestra del Nuevo Teatro Italiano

... Acque, por el grupo Occhesc.Dirección y coreografía: Enzo Cosimi; Música: Pierluigi Castellano; diseños: Marco Jannuzzi; diapositivas: Paola Court; bailarines: Paola Autore, Rachele Caputo, Enzo Gisimi, Karin Elmore, Enrica Palmieri. Centro de Nuevas Tendencias Escénicas. Sala Olimpla. Madrid, 28, 29 y, 30 de noviembre.

Atmósfera

Cosimi arma una atmósfera donde hay fuerza. Para ello cuenta con un grupo de ballarinas muy entrenadas y capaces que han entendido ese algo caligráfico que hay en la propuesta, tal como apunta Marinella Guatterini en sus notas a la obra. La gestualidad ha sido estudiada a fondo, y las marcas del coreógrafo exigen del bailarín la entrega de toda su energía.No se puede exigir un producto puro a quien se encuentra entre tantas aguas. De hecho, la danza contemporánea, en su aspecto teatralizante (que tanto ha imperado y que ahora parece ceder otra vez el lugar a un movimiento más bailado; ha sido un cajón de sastre donde han hallado cobijo las maneras de una plástica variada, y en algunos casos, ajena a la danza misma. La danza-teatro es un terreno resbaladizo, pues en esta modalidad escénica la inventiva juega un papel fundamental. Siempre se corre el riesgo de aburrir al espectador, y, salvo algunos casos brillantes (Pina Bausch, por ejemplo), en la mayoría de los montajes de este género sobra cerebralismo y falta acción. Puede asegurarse que la danza-teatro es aún una puerta abierta, un enigma sin resolver ni superar.

Tampoco es ...Acque una obra totalmente abstracta, pues las diapositivas, con su alusión al sueño, y la mesa rodante, esa especie de ara ritual, establecen un contenido lleno de precisiones que la mímica no aclara. Es una obra terminada en su factura, pero no tanto en su hilo interior, otro de los graves problemas de la danza de hoy.

El Centro de Nuevas Tendencias Escénicas ha tocado la flauta trayendo a Cosimi, pues, pretendiendo ofrecer algo de actualidad, la mayoría de las veces ofrece espectáculos fallidos donde no se puede adivinar qué criterios se emplearon a la hora de programarlos. Esta institución sería la indicada para ofrecer al público madrileño una panorámica coherente del género.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_