La 'contra' discute su estrategia para utilizar la ayuda norteamericana

Los dirigentes de la Unión Opositora Nicaragüense, que integra a los grupos de la guerrilla antisandinista, comenzaron ayer una reunión, que durará dos días, destinada a discutir su estrategia política y militar para utilizar la ayuda de 100 millones de dólares (unos 13.500 millones de pesetas) prometida por Washington. La contra -que lucha para derrocar el régimen sandinista- también intentará en esta reunión resolver los desacuerdos existentes sobre estrategia política entre los distintos grupos que la forman.El jefe militar de la contra, Adolfo Calero, no asistirá a la reunión debido a que el Gobierno del presidente de Costa Rica, Óscar Arias, le ha negado la entrada en el país por considerar que se trata de un "combatiente involucrado en acciones belicosas". Costa Rica se ha declarado en repetidas ocasiones neutral en el conflicto nicaragüense, a pesar de las acusaciones referentes a la utilización de su territorio por parte de la contra como base para lanzar sus ataques contra Nicaragua.

Según afirmaron fuentes de la contra, la reunión se centrará sobre todo en dos temas. Uno de ellos es cómo mejorar y ampliar sus operaciones militares a través de las nuevas armas que les va a proporcionar EE UU con el fin de llevar la guerra de las áreas fronterizas a las principales ciudades de Nicaragua.

La otra cuestión que va a ser analizada es la de intentar ampliar el apoyo a la contra entre la población nicaragüense y crear una base sólida para lo que los funcionarios norteamericanos denominan una alternativa viable al régimen sandinista.

Movilizar a la población

Según los observadores militares en la región, la clave para un avance de la guerrilla nicaragüense -que tiene entre 10.000 y 15.000 hombres- es lograr un apoyo suficiente entre la población del interior del país para equilibrar el poder del Gobierno sandinista en las ciudades y en el campo. Sin embargo, según estas fuentes, no existen indicios de que la contra haya logrado atraer a los nicaragüenses, a pesar del creciente desencanto provocado entre la población por la prolongación del conflicto y la crisis económica.Uno de los factores que han perjudicado a la contra es el de los ataques que efectúa regularmente contra las cooperativas de agricultures, a las que considera objetivos militares porque fueron creadas por los sandinistas y por el hecho de que los dirigentes campesinos a menudo están armados.