Los países nórdicos adoptan míninas medidas de seguridad para sus dirigentes

Las medidas de protección en los cinco países nórdicos (Islandia, Noruega, Suecia, Finlandia y Dinamarca) para los representantes del Estado son mínimas y, en algunos casos, da la impresión de que son nulas. Hasta ayer no se concebía la posibilidad del atentado político.El primer ministro danés, Poul Schluter, concedió el viernes una conferencia de prensa para comentar los resultados del referéndum sobre la Comunidad Europea celebrado la víspera. La reunión se desarrolló en la llamada oficina del primer ministro, un grupo de dependencias situadas en el palacio en que tiene su sede el Parlamento.

Este enviado especial subió hasta la tercera planta sin encontrarse con nadie y sin que nadie le pidiera ninguna identificación. Una vez allí, un funcionario que pasaba le indicó hacia donde tenía que dirigirse para la conferencia de prensa. Ningún agente de seguridad, ningún control sobre el contenido de la bolsa.

La presidenta de Islandia, Vigdis Finbogadottir, tiene su residencia en una antigua granja de las afueras de Reikiavik. Cualquiera puede llegar hasta allí y entrar en la casa, que está abierta. La presidenta vive con su hija, una cocinera y un chófer. No existe ninguna barrera de control en el acceso y no hay ningún agente a la vista. Tras la entrevista que concedió el pasado agosto a varios periodistas españoles, un miembro del grupo dejó olvidados unos papeles. Volvió y pidió permiso para entrar en la residencia. Nadie contestó. Finalmente, optó por dirigirse hasta la pieza en que estaban sus papeles, recogerlos y salir sin más problemas.