Pruebas difíciles

Josefina Alix continúa estos días la investigación en archivos españoles, aunque la destrucción de documentos durante la guerra civil hace muy difícil la tarea, y a pesar de que sus resultados añaden datos nuevos sobre los artistas y obra representada en el pabellón no es posible aún calcular el volumen real que se mostró en París, según ha explicado a Efe.Las dificultades se agravan por el hecho de que el pabellón se inauguró más tarde que los otros, y dado su pequeño tamaño se organizó una exposición cambiante -periódicamente se retiraban unas obras para poner otras- y se hicieron exposiciones paralelas en otros locales.

La investigadora señaló que ha localizado por las fotografías 12 cuadros de José Gutiérrez Solana presentes en la exposición, obra de Antonio Rodríguez Luna, y cuadros de Eduardo Vicente.

Su empeño más reciente es localizar a los fotógrafos franceses que trabajaron para el pabellón y que figuran pagados también por el Gobierno republicano.

La recuperación de la obra de Pablo Ruiz Picasso por España se inició en 1981, con la vuelta del Guernica y sus dibujos preparatorios. Después, en 1985, fue recuperada para España la Dama oferente (Femme au vase), que formaba parte del legado Picasso, y se expuso en la muestra Escultura española (1900-1936). Esta obra figuró además en el pabellón español de París junto al Guernica y con las cuatro esculturas mencionadas.

La figura, de la que existe otra prueba en la tumba del artista malagueño en Vauvernagues, vino a España según la voluntad expresa de Picasso, aunque Josefina Alix duda que fuera el propio Pablo Picasso quien legó La dama oferente.

Al parecer, la escultura estaba en el taller del artista con un cartel, en cartón, en el que afirmaba su pertenencia a España. Bajo el texto figuran las firmas de Jacqueline, su última compañera, junto a los nombres de otras dos personas, y una firma que dice Pablo Ruiz Picasso, pero "parece no corresponder a la letra del pintor y podría ser la de su hijo", en opinión de la investigadora.