4.000 millones de pesetas para promover el consumo de aceite de oliva en Europa

En su primera comparecencia en un Consejo de Ministros de Agricultura de la CEE, el titular español, Carlos Romero, se quedó sorprendido de la ineficacia de los mecanismos comunitarios de decisión. En la reunión de ayer sólo se decidió el aumento de 4.000 millones de pesetas en la ayuda al consumo del aceite de oliva en los países de la Comunidad Económica Europea (CEE).Romero espera aún poder salvar, o al menos dulcificar, la cuestión de la supresión, en el plazo de seis años, del apelativo methode champenoise para algunos cavas, que han predecidido los diez amparándose en la indefensión jurídica de España entre la firma del tratado de adhesión y el ingreso. España ha planteado una reserva para ganar tiempo e intentar, ofreciendo compensaciones bilaterales -una vez más- convencer a algunos países, como Francia, de variar su posición.

El aumento de la ayuda al consumo del aceite de oliva no se aplicará por el momento en España, pero -según declaró Carlos Romero- sí puede beneficiar al sector español al fomentar el cambio de gustos de los consumidores en la CEE. Precisamente el incentivo del consumo de aceite de oliva es una de los soluciones para hacer frente a ¡os fuertes excedentes de este producto en la Comunidad, situación que se verá empeorada con la entrada de España.

Romero piensa proponer, cuando se hable de la reforma de la política agrícola común (PAC), que los precios agrícolas se fijen en diciembre y no en marzo, como en la actualidad. Esto facilitaría los cálculos económicos del sector. España, explicó Romero, ha instaurado ahora este calendario de enero a enero, "y da una tremenda pereza tener que dar ahora marcha atrás con la adhesión".